Va AMLO en serio contra Peña Nieto y Calderón ¿o Pactaría con ellos?
La inminente extradición de Emilio Lozoya Austin, exdirector de Petróleos Mexicanos, así como del exgobernador de Chihuahua, César Duarte, al igual que la nueva investigación del caso Ayotzinapa y el juicio del exsecretario de Seguridad Pública, Genaro García Luna, todo esto le otorga al gobierno federal una oportunidad inmejorable para llevar a juicio, por primera vez en la historia de México, a los dos presidentes anteriores: Enrique Peña Nieto y Felipe Calderón Hinojosa, en un acto de justicia para los sectores agraviados, que son muchos.
Sin embargo, cabe la duda de si se trata de un proceso real o solamente de un show mediático, un distractor en momentos de tanto estrés social por el desempleo causado por la pandemia o por la inseguridad desbordada en gran parte del país. Incluso, existen versiones de que Andrés Manuel López Obrador podría haber pactado ya con ellos para que sigan en libertad, pero también hay voces importantes que opinan lo contrario; o sea, que las cosas van en serio y hay señales muy claras en esa dirección.
Si López Obrador se apega a cumplir uno de sus principales compromisos a lo largo de su añeja lucha para llegar al poder, o sea el combate frontal a la corrupción, esto debe desembocar en que se aplique la ley en contra de quienes cometieron delitos contra la sociedad y, de plano, caigan en la cárcel, algo que los mexicanos no estamos acostumbrados a ver de manera regular. Es decir, algunos sí han caído, pero por semanas o meses. El gobierno también se comprometió a devolver al pueblo, en obras o servicios, lo que se le había robado.
La captura de César Duarte y su próxima extradición le dan al presidente elementos legales de sobra para llamar a cuentas a los principales colaboradores de Peña Nieto, como Luis Videgaray Caso, secretario de Hacienda y Crédito Público Público en ese sexenio, quien figura como presunto responsable de facilitar la "Operación Safiro", cuyo objetivo fue desviar centenas de millones de pesos a las campañas del PRI en el 2016. Además de este, nombres como el de Manlio Fabio Beltrones, así como de algunos gobernadores y exgobernadores, entran en la puja para el posible enjuiciamiento. Todos los caminos deberán llevar, sin duda alguna, hasta Enrique Peña Nieto.
En este sentido, lo mismo ocurrirá con el desenlace del caso Ayotzinapa, el cual apunta directamente hacia Tomás Zerón de Lucio, extitular de la Agencia de Investigación Criminal de la entonces PGR y artífice de esa "verdad histórica" que nunca pudieron consolidar, pero no sólo hacia él, sino también a Jesús Murillo Karam, procurador general en ese tiempo, a militares y funcionarios policiacos que ya se creían libres de toda culpa en la desaparición de los 43 normalistas.
Y respecto a la detención del exdirector de Petróleos Mexicanos, quien debe llegar a suelo mexicano entre hoy y mañana, el gobierno federal tiene una veta de la cual aún se desconoce la profundidad. Por lo pronto, en sus declaraciones preliminares ya salpicó a legisladores y hasta a gobernadores en funciones, pero hay para mucho más, según las filtraciones de información que cada día asoman en el entorno mediático. Por supuesto que el principal implicado sigue siendo Peña Nieto.
En cuanto a Felipe Calderón, la sombra de Genaro García Luna no lo deja estar en paz; la "Operación Rápido y Furioso", a través de la cual su gobierno permitió el acceso de armas de fuego, incluyendo cuatro misiles, que fueron a parar en manos de los cárteles de las drogas, lo implica directamente y lo puede alcanzar más temprano que tarde. Será por eso que Vicente Fox Quesada, viendo tanto movimiento cerca, parece haber asumido una postura más prudente y ha optado por el silencio, cuando hasta hace poco opinaba en todos los foros al alcance contra el gobierno actual.
Sin embargo, por el mero hecho de que no exista un antecedente sobre exmandatarios tan cerca de la cárcel, es normal que surja la duda de un posible pacto con ellos para evitarles esta consecuencia. Entonces, López Obrador tendrá que actuar de manera irrefutable y transparente si quiere convencer a la sociedad de que cumple sus compromisos, al menos en esa parte por ahora; claro que le faltan muchos más. Muy pronto se sabrá si hay plena convicción de aclarar estos casos y proceder hasta sus últimas consecuencias, caiga quien caiga, como suelen decir quienes están en el poder.
COLMILLOS Y GARRAS
LA POLICÍA CIBERNÉTICA ya investiga los ataques a las cuentas oficiales del alcalde Jorge Salum y de uno de sus funcionarios, hecho que curiosamente ocurre después de la presentación de la denuncia por desvío de recursos en contra de algunos exfuncionarios del trienio anterior... SOSPECHOSAMENTE, TAMBIÉN DESDE el anonimato, se han difundido mensajes en contra de actuales integrantes del gabinete municipal. En política nada es circunstancial; entonces, no se puede dejar de lado que estos ataques surgieron desde las sombras después de presentada esa denuncia... Y COMO VIENEN cinco querellas más ante la Fiscalía Anticorrupción en el curso de estos días, nada raro sería que veamos más incidentes como estos en redes sociales. Que nadie se sorprenda, pues.
Twitter @rubencardenas10