Momentos que no tienen precio

En esta época de pandemia en la que, en ciertos casos, los padres y madres de familia disponemos de un poco más de tiempo debido a los ajustes de jornadas laborales, ya sea en las empresas, en instituciones gubernamentales y en otros sectores, seguramente se ha presentado la oportunidad de convivir más con los hijos e hijas dentro del hogar, acatando las indispensables medidas sanitarias recomendadas por las autoridades de Salud, con el objetivo de no propagar más los casos de coronavirus (Covid-19) que tanto daño nos han hecho, sobre todo cuando precisamente no se han respetado esas normas que nos habían ayudado a contener ese virus, al menos en el estado de Durango.

Sin embargo, retomando el tema del tiempo que podemos tomarnos para estrechar nuestras relaciones como familia, en los días recientes, una de mis hijas (la mayor) nos invitó a disfrutar una nueva película que apenas hace unos días se subió a una conocida plataforma de "streaming".

Con el título original de "Wonder", que luego en español relanzaron como "Extraordinario", la película, al menos en el plano personal y familiar, cumplió y rebasó todas nuestras expectativas, en virtud de que se trata de un filme que mueve todas nuestras fibras más sensibles.

La historia gira en torno a un niño de 10 años llamado August "Auggie" Pullman (a quien Jacob Tremblay le da vida como actor), que padece una deformidad en el cráneo y rostro. La misma es conocida como "síndrome Treacher-Collins". Luego de varias cirugías y de haberse educado en su casa por sus propios padres, el pequeño comienza a estudiar en un colegio, donde es discriminado y sufre acoso escolar por su apariencia física. No obstante, "Auggie" intenta derribar todas las barreras que la sociedad le va poniendo en su camino.

De acuerdo con el portal Spoiler, una de las preguntas que el público se ha hecho luego de ver la aclamada película es si la misma está basada en hechos reales, de ahí que al investigar al respecto se despejó la duda: "Wonder" es un filme que está basado en la novela "La lección de August", escrita por la autora Raquel Jaramillo Palacio.

Curiosamente, añade la página de internet, la autora reveló que los personajes son ficticios, pero que todo estuvo basado en una situación que vivió en carne propia, en Nueva York. ¿Qué le ocurrió? En 2017, Jaramillo Palacio dialogó con el diario El Periódico y comentó los detalles: "Estaba esperando delante de una heladería a que mi hijo mayor, Caleb, que entonces tendría unos 11 años, saliera con unos batidos, cuando una niña con una grave malformación craneofacial vino a sentarse junto a mí y mi hijo menor, Joseph".

"Pensé para mis adentros que, probablemente cuando Joseph (de tres años de edad) la viera, se iba a echar a llorar, así que decidí levantarme discretamente para evitar esa situación y que la niña se sintiera herida. No lo logré. Caleb salió de la heladería y le dije que se pusiera en marcha, pero se le cayeron los batidos. Mientras Joseph, como yo había sospechado, empezó a llorar porque había visto a la niña. Oí a la madre de aquella niña decir 'Creo que ha llegado el momento de irse'.

Y me sentí fatal. Por querer proteger a mi hijo, había hecho daño a aquella familia... Esa misma noche empecé a escribir 'Wonder'", añadió Raquel.

Conforme la trama se desarrolla, la historia nos atrapa y nos invita a reflexionar sobre la forma en que en ocasiones tratamos a aquellas personas que son diferentes a las demás, sobre todo por su apariencia física, y que pocas veces nos detenemos a meditar en torno a lo que vienen arrastrando, con todo el dolor que soportan debido a la discriminación que sufren por parte de la mayor parte de la sociedad, que no se pone en los zapatos de alguien que vive en esas circunstancias.

"Wonder" o "Extraordinario" es un filme que vale la pena disfrutar en familia, porque se trata de una historia que nos llama a pensar detenidamente sobre la manera en que hemos tratado a una persona que por el simple hecho de lucir diferente en su apariencia física ha sido objeto de discriminación.

Es una lección sobre cómo podemos descubrir un mundo de cualidades detrás de una persona a la que podemos juzgar equivocadamente sólo por su aspecto físico y que es quien nos puede enseñar cómo se observa la vida cuando se padecen actitudes de indiferencia y rechazo.

En fin... ya para no hacer larga esta colaboración, le comento, apreciable lector(a), que mi familia y yo disfrutamos a tal grado esta película que, no en pocas ocasiones, rompimos en llanto por algunas escenas que nos conmovieron.

Y qué decir del final, que, por supuesto, no le voy a relatar, para que tenga la oportunidad de experimentar una variada gama de sentimientos que nos despierta dicho filme.

Ya para concluir, quiero invitarlo a que no desaproveche la oportunidad de atesorar esos momentos, y de buscar más el acercamiento con su familia para convivir en actividades tan simples pero a la vez tan significativas como el hecho de observar juntos una película en casa. Seguramente, será una experiencia inolvidable que los unirá más si la disfruta con la actitud de reforzar esos nexos que sólo con ellos se pueden sentir y consolidar con el paso del tiempo.