¿Por qué caminar sirve como terapia?
Durante mucho tiempo, se ha sabido que caminar puede ayudarte a meditar y a vaciar tu mente. Friedrich Nietzsche, por ejemplo, recuerdan que el pensamiento fluye mejor cuando te encuentras en movimiento.
Según recientes investigaciones científicas, demuestran que nuestro cuerpo agradece esta práctica, ya que reduce el riesgo de padecer enfermedades como cardiovasculares, ansiedad y depresión.
Debido a la pandemia del COVID-19, las citas en los consultorios y despachos quedan prohibidas, lo que ha tenido que reformularse para crear espacios cómodos y seguros. Según Aída Rubio, coordinadora del equipo de psicólogos de la plataforma digital TherapyChat, el problema de las terapias hoy en día es que al realizarse con cubrebocas pierden mucha información de su lenguaje corporal, genera incomodidad y mejor sensación de distancia personal.
Las consultas a través de Skype podrían ayudar con ello, sin embargo, no es una solución universal. Debido a ello, se ha implementado lo ahora denominado terapias Walk and Talk (caminar y hablar), que se trata de realizar caminatas entre el paciente y el psicólogo.
La American Psychology Association lleva años hablando de los beneficios de hacer terapia paseando con los especialistas, sin embargo, reservan la práctica Walk and Talk a determinados perfiles. Comparten que es adecuado para quienes valoran el contacto con el aire libre, la vida sana y encontrar un momento para ejercitarse en el día. Asociar el ejercicio con la terapia ayuda a potenciar su creatividad y autoconciencia.
Además al trabajar los conflictos al aire libre recibes nuevos estímulos del paisaje que generan nuevas asociaciones y reflexiones. Los especialistas pueden reconocer más fácilmente la sintomatología gracias a que el paciente llega con una comunicación más relajada y un mayor compromiso de valores, aprendizaje y autoconocimiento más profundo.
Algunos de los beneficios de realizar Walk and Talk son:
*Autoconciencia
*Compromiso con la consecución de objetivos
*Capacidad de resiliencia
*Restauración vital
*Reducción de síntomas como estrés, ansiedad, depresión y cognición distonada
*Aumenta la relajación
*Mejor percepción y motricidad
*Disminuye el estado de alerta
*Mayor conexión emocional
Los especialistas aclaran que no existen soluciones universales, por lo que esta práctica también puede tener contras, como el riesgo de que una tercera persona esté escuchando y el paciente se sienta inseguro o la pérdida de cercanía con el terapeuta. Es importante que exista una conexión con el especialista.
Otro de los puntos a destacar, es el beneficios del apoyo emocional que es vital para la salud mental. Por ello, aclaran que no es necesario realizar esta práctica sólo con especialistas, lo cierto es que puede realizarse con una persona que los escuche, les de calma, no juzgue, y ayudará a sentirse mejor.