'Cepillín' también aprendió a hacer gorditas

A las 11:00 de la mañana del 22 de febrero de 2020, Ricardo González llegó a un restaurante de gorditas ubicado sobre el Bulevar Constitución.

Al ingresar al lugar lo hizo sin maquillaje, pero cuando vio que las personas lo reconocían se caracterizó de "Cepillín", porque, "sé que así me quieren ver".

"He comido gorditas en otras partes de México, pero en Torreón, pese a tantas veces que había venido, apenas será la primera vez que las pruebe. Siempre me las recomendaban" , dijo a El Siglo de Torreón.

El artista pidió dos de barbacoa y una de chicharrón prensado así como una bebida gaseosa de cola. Tenía mucha hambre así que de igual manera ordenó un menudo y un pan francés.

Recién trascendió que además de comer tales antojitos laguneros, se mostró interesado en saber cómo se hacían.

De acuerdo con empleados del lugar, el regiomontano se metió a la cocina, preguntó como se lograba hacer una buena gordita y hasta agarró los utensilios correspondientes para calentar bien en el comal las gorditas que en ese momento se preparaban.

Carlos Gallegos, encargado del lugar recordó con nostalgia esa visita del payasito.

"Cuando él nos visitó, aquí en Gorditas del Cisne fue una emoción muy grande, al ingresar al negocio cambio nuestro ambiente con su buena vibra y las caras de asombro de nuestros clientes, ya que era una persona que con su sola presencia despertaba muchas emociones, una persona muy sencilla y humana, siempre atenta con la gente de buen modo, con esa alegría y bromista como era. Mi madre , Magdalena González Vázquez, siempre estará agradecida por esa visita", comentó Gallegos.