Colocarán retenes y sancionarán hasta con cárcel a quien insista en ingresar al Cañón de Fernández

El parque estatal Cañón de Fernández seguirá cerrado en esta temporada vacacional y las autoridades advirtieron que se contará con retenes de vigilancia y se podría llegar a detener personas que insistan en ingresar o que sean renuentes a retirarse de ser sorprendidas en el parque.

Raúl Villegas, subsecretario de Recursos Naturales y Medio Ambiente del estado de Durango en la región Laguna así como Francisco Valdés Perezgasga, acompañado de Gladys Aguirre (ambos son parte de la organización civil Prodenazas) además del director de Ecología del municipio de Lerdo, Abel Ramos, ofrecieron este lunes una rueda de prensa para informar a la población sobre las medidas que se van a adoptar para garantizar el cuidado del parque que está catalogado como un área natural protegida.

Entre los principales argumentos que ofrecieron se encuentra la pandemia, la falta de humedad y exceso de yerba seca así como material flamable además de que las aguas del río "vienen bravas", dijeron.

Debido a lo anterior de realizará un operativo con retenes para poder desviar a las personas que pretenden acudir a El Cañón de Fernández y serán tres en las principales entradas aunque se tendrán otros en algunos puntos estratégicos. Los principales retenes se colocarán en la entrada de Sapioriz, otro es en Graseros y otro más en Santa Anita y serán aproximadamente 150 colaboradores para tal efecto.

Adicionalmente se espera contar con algunas brigadas de Conafor (pues buscan cuidar que no se repita lo de la Sierra de Arteaga que ha movilizado a todos los cuerpos de auxilio) y también con algunas brigadas de la dependencia municipal tanto de Protección Civil como la Dirección de Ecología y Medio Ambiente.

Estarán ayudando además activistas de Prodenazas.

El director de Medio Ambiente de Lerdo, Abel Ramos, mencionó que esperan que las personas sean conscientes y se eviten llamados de atención además de un traslado en vano.

Valdés Perezgasga mencionó que estás medidas de cierre son necesarias porque actualmente en El Cañón de Fernández hay un mantillo de material flamable por lo que ven que el peligro de incendio es máximo.

"Le pedimos a la gente que no vaya, que eviten está afluencia porque no se va a poder entrar", dijo Perezgasga.

Villegas por su parte adelantó que además se espera poder construir casetas de vigilancia.

Se colocarán tres casetas, una en Sapioriz, otra en Santa Anita y una más en Graseros en las cuales se invertirán alrededor de 380 mil pesos.

Con estás medidas se busca limitar el acceso ya que de jueves a domingo acuden 5 mil personas pero hubo un año que acudieron 15 mil y esperan que debido a la pandemia muchas personas busquen acudir.

Fue el pasado fin de semana que el Consejo Consultivo del Parque Estatal Cañón de Fernández sesionó y determinó que el Cañón de Fernández siga cerrado durante la Semana Santa.

El órgano consultivo está integrado por dependencias federales como SEMARNAT, PROFEPA, CONAFORT, la representación de las instancias educativas como el TEC DE LERDO y la Facultad de Ciencias Biológicas de la UJED, así como cámaras de empresarios, los jefes de cuartel de cada uno de los ejidos alrededor del cañón de Fernández y la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales.

Anteriormente había sido la Cámara Nacional de la Industria de la Transformación (Canacintra) de Gómez Palacio la que solicitó de manera formal al Consejo Consultivo del Parque Estatal Cañón de Fernández su cierre.