La iniciativa para reformar la Ley de Hidrocarburos pone en riesgo la competitividad, el clima de negocios, además de que, de aprobarse, violará la Constitución y tratados comerciales internacionales que firmó México, dijo el Instituto Mexicano para la Competitividad (IMCO).
El grave riesgo que observa el IMCO es que se dan facultades discrecionales a la Secretaría de Energía y a la Comisión Reguladora de Energía (CRE) para suspender los permisos a privados vigentes cuando consideren que representan un peligro inminente para la seguridad nacional, energética o para la economía.
Las condiciones bajo las cuales se daría ese escenario, "en los hechos, representaría un acto de expropiación directa" porque se intervendrían u ocuparían las instalaciones y también se hará uso del personal de los permisionarios.
Por ello, exhortaron a los diputados "a no aprobar esta iniciativa. Esto representaría un duro golpe al Estado de derecho y amenazaría las inversiones presentes y futuras, no solo en el sector energético, sino en otros sectores clave para la competitividad de México", puntualizó el organismo.