En un contexto de crisis hídrica en el país, nace al mismo tiempo que en la Comarca Lagunera la Contraloría Ciudadana del Agua de Mexicali, Baja California, fruto inicial de la iniciativa ciudadana de Ley General de Aguas que promueve la coordinadora nacional Agua para Todos en la Cámara de Diputados. Surge ante las problemáticas de escasez de agua, creciente demanda de sectores, baja eficiencia por mala infraestructura y fallas en la gestión que promueven inversiones con uso intensivo de líquido. Aparece con el objetivo de generar vigilancia y auditoría social en los procesos concernientes al agua.
Entre los temas de la agenda social impulsada por esta contraloría se encuentran la desactivación definitiva del proyecto industrial cervecero Constellation Brands, la vigilancia sobre la concentración de concesiones y acaparamiento de agua, en la transmisión irregular de derechos de agua y en los proyectos promovidos conjuntamente entre la Secretaría Estatal del Agua y el Ejecutivo de Baja California.
La problemática de la región de Mexicali se puede sintetizar en cuatro aspectos.
Primero, la escasez natural de agua al estar ubicado en una zona árida, con temperaturas elevadas y niveles de precipitación bajos del orden de 65 milímetros al año. Por tal, depende del agua del Río Colorado que se origina en las Montañas Rocallosas de los Estados Unidos, a miles de kilómetros de Mexicali.
Luego, la creciente demanda de agua de los diferentes sectores de usuarios, principalmente el agrícola, que consume el 86 % de la disponibilidad total.
En tercer lugar, las bajas eficiencias del uso de agua que aún prevalecen tanto en el campo como en la ciudad, y que se deben en parte a la falta de infraestructura adecuada.
Por último, las fallas de gestión y de errores en la toma de decisiones por parte de agentes gubernamentales que promueven inversiones que implican un uso intensivo de agua, como recientemente se observó con el caso de la cervecera Constellation Brands en Mexicali.
Congruentes con su propia historia de defensa del agua y del territorio que caracteriza a los pobladores de esa región, misma que se ilustra con los episodios del asalto a las tierras del Valle de Mexicali, la problemática de salinidad del Río Colorado y recientemente las manifestaciones en contra de las políticas privatizadoras de los servicios de agua y la cancelación del proyecto Constellation Brands, es que diversos grupos de ciudadanos organizados toman la iniciativa de crear la Contraloría Ciudadana del Agua de Mexicali.
Esto con la idea de coordinar los esfuerzos de la comunidad preocupada por la protección de los recursos hídricos escasos y en proceso de continuo deterioro.
Entre los objetivos que persigue la contraloría ciudadana se encuentran, primero, realizar una vigilancia social directa y estrecha sobre todos los procesos que involucren tomas de decisiones en materia de agua.
Segundo, implementar auditorías con carácter vinculatorio y con una coordinación estrecha con académicos y autoridades para el intercambio de información crítica.
Y tercero, participar activamente en los procesos de toma de decisiones.
Lo anterior, buscando siempre que se cumplan los principios del derecho humano al agua, sostenibilidad ambiental y seguridad y justicia hídricas.
La contraloría ciudadana se integra por un grupo compacto pero representativo de cada colectivo social.
La idea central es mantener una coordinación estrecha para los trabajos que se deberán realizar de manera permanente en un marco de responsabilidad compartida y de enlace con autoridades de Agua y Medio Ambiente, así como con otras que involucren la Función Pública.
La agenda general establecida para la contraloría ciudadana incluye la revisión de temas tales como desactivación efectiva del proyecto Constellation Brands en la región, la concentración de concesiones y acaparamiento de agua en el Distrito de Riego 014 y en la ciudad de Mexicali.
Además, la transmisión irregular de Derechos de Agua, proyectos promovidos unilateral y conjuntamente por el organismo operador, la Secretaría Estatal del Agua y el Ejecutivo de Baja California, tales como desalinizadoras y otras que favorecen a grupos de interés.
Finalmente, garantizar el derecho a un medio ambiente sano en el Delta, los ríos Colorado, Hardy y las lagunas del sur de Mexicali, así como la municipalización de los servicios de agua y saneamiento.
De iniciativa ciudadana.
@kardenche