Ganaderos, víctimas de acoso policial

Además de los embates de la sequía, hay ganaderos que tienen que lidiar con el acoso de las corporaciones de seguridad, denunció Rogelio Soto Ochoa, titular de la UGRD.

Comentó que ganaderos de Rodeo señalan que han sido objeto de abusos por parte de agentes de la Policía Estatal y la Policía Investigadora de Delitos (PID).

"Ganaderos de esa región señalan que son objeto de acoso por parte de los agentes, quienes constantemente les exigen documentos de sus animales", expuso.

El Presidente de la Unión Ganadera Regional de Durango (UGRD) comentó que hace un mes y medio estuvo en Rodeo para participar en la entrega de suplemento alimenticio y desde entonces la situación no mejora, pues el acoso sigue.

Mencionó que esta situación puede estarse presentando en otros municipios, además de Rodeo, por lo que se espera que estas malas prácticas desaparezcan.

Dijo desconocer si ya existen denuncias al respecto, aunque consideró que es lo más recomendable, con la finalidad de que se actúe lo más pronto posible.

Llamó a las autoridades a poner orden con las corporaciones policiales, pues los ganaderos no pueden estar siempre con el temor de ser extorsionados.

En lo que se refiere a la sequía, Soto Ochoa mencionó que los productores se han visto en la necesidad de vender alrededor del 10 por ciento de los vientres (hembras que ya tienen por lo menos un parto).

Lo anterior, con el objetivo de comprar alimento para el resto de los animales, de tal manera que no mueran de hambre y las pérdidas sean mayores.

Mencionó que en el vecino estado de Chihuahua ya hay ranchos que se han visto en la necesidad de vender todo su ganado.

Situación

Ganaderos de la región señalan que son objeto de acoso por parte de los agentes, quienes les exigen documentos de sus animales.

Daño

Esta situación puede estarse presentando en otros municipios, además de Rodeo, por lo que se espera que estas malas prácticas desaparezcan.

Actuación

Llaman a las autoridades a poner orden con las corporaciones policiales, pues los ganaderos no pueden vivir con el temor de ser extorsionados.