Tras presumir que su administración acaba de comprar la refinería Deer Park, el presidente Andrés Manuel López Obrador descartó una reforma fiscal, porque, señaló, las finanzas públicas "están bien" pues no hay corrupción, ni gastos superfluos, derroches y lujos.
López Obrador mostró datos, al corte del 7 de julio, de los ingresos del Gobierno Federal y de la recaudación.
Destacó que, en lo que va del año, se ha logrado una recaudación total de 2 billones 286 mil 320 millones de pesos, "un poquito más de 200 mil millones con relación al mismo periodo del año pasado".
El Presidente puntualizó que se está arriba de lo que se estimó en la Ley de Ingresos para este año y por eso "va a alcanzar para el gas".
Asimismo, López Obrador descartó una reforma fiscal para aumentar los impuestos "porque no se necesita, afortunadamente".