¿Qué comer tras la vacuna contra Covid-19?

La vacuna no nos pega igual a todos, lo general es un poco de fiebre, cuerpo cortado, dolor en articulaciones y sueño. Sin embargo, hay organismos que no presenran lo mismo, por ello es importante llevar una dieta equilibrada que ayude a la pronta recuperación, como ocurre con otras vacunas.

Y es que la dieta desde la mañana hasta la noche, debe tener presentes alimentos ricos en vitamina C, además de verduras verdes y muchos caldos, en especial de pollo y res. Estos últimos aparte de ser ricos en proteína, al estar calientes nos ayudarán a regular la temperatura corporal y eliminar la sensación de fiebre.

Para desinflamar articulaciones hay que comer uvas, guayabas y manzanas ya que son desinflamatorios naturales gracias a su contenido de fitoquímicos como carotenoides, flavonoides y otros polifenoles los cuales se ha comprobado son necesarios para prevenir la artritis.

Aunque en estos tiempos de confinamiento se nos antoje mucho una rebanada de pizza o de pollo frito, es mejor abstenerse y disciplinarse, ya que una dieta equilibrada nos ayudará a tener un organismo fuerte contra la Covid-19.

¿QUÉ PASA SI TOMO ALCOHOL?

El consumo del alcohol tiene efectos inmunosupresores que deprimen el sistema inmunológico. Si se toma alcohol el día de la vacuna, el virus entra al organismo en menor cantidad y al combinarlo con el alcohol puede que la vacuna tenga un efecto mucho más fuerte.

Recordemos que la vacuna produce náuseas, dolor de cabeza y alteración de la consciencia, por lo que al tomar alcohol, esto se puede potencializar, los efectos tanto del alcohol como de la vacuna se pueden confundir.

RIESGO DE REFLUJO Y ARRITMIAS

En el sistema inmunológico las células de defensa como los linfocitos T y B son los que nos ayudan a enfrentarnos a las diferentes reacciones cuando hay un cuerpo extraño al nuestro. Es por eso que el consumo de alcohol en dosis elevadas al llegar a nuestro tubo digestivo, nos da trastornos de motilidad esofágica (disfunción del esófago) causando reflujo, gastritis y hasta diarrea.

Lo ideal es tener 21 días de abstinencia después de ser vacunados por Covid-19.

Y eso no es todo, también puede afectar a nuestro corazón y ritmo cardiaco, pues a nivel cardiovascular puede provocar arritmias y taquicardias, y esto hace que el riñón aumente su trabajo.