Exhiben en museo joyas de Durango en escala

La exhibición de dos piezas únicas a escala de lugares emblemáticos en Durango, llega al Museo Francisco Villa, una pequeña colección del artista duranguense José Enríquez López, ambas representaciones realizadas hace más de 20 años.

Se trata de la maqueta en miniatura de la Catedral Basílica de esta ciudad, en la cual se puede apreciar cada detalle, incluso el propio monumento del Papa Francisco II en su visita a Durango hace 31 años.

La otra joya es el Palacio de Zambrano, en la que también se ven detalles de los característicos arcos, las columnas toscanas, la fachada completa y la luz sepia que tiene en su interior este 'palacete' del siglo XVIII.

JOYAS DE LA FAMILIA

Las dos piezas son propiedad de la familia Enríquez, pues tras la muerte del artista, su nieto Alejandro es quien se ha encargado de darlas a conocer al ser unas maquetas hechas a detalle y réplicas de las edificaciones.

Fue precisamente el acercamiento del director del museo, Gilberto Jiménez, a la familia del artista, que se logró que las joyas llegaran hasta las instalaciones del recinto, algo que, hasta ahora, no se había hecho.

"Yo tuve la oportunidad de conocer a Alejandro, y un día me platicó que su abuelo era ebanista y que había hecho unas maquetas con los edificios de Durango, me mandó fotos y pensé en qué cómo era posible que esto no fuera conocido", dijo en la presentación de las obras el titular del museo.

Aunque el creador de estas dos piezas no era arquitecto sino un 'diseñador de madera', ambas maquetas han sido comparadas con el trabajo de Manuel Tolsá, uno de los arquitectos más reconocidos del siglo XIX, quien diseñó en escala la Catedral Basílica de Puebla.

Ambas piezas de arte, joyas para la familia Enríquez, estarán expuestas durante un mes en el recinto.