¡Corte y queda!

O la amas, o la odias, así es Don't look up (No mires arriba, por su título en español). Netflix cerró el 2021 con el estreno de una mega producción, de hecho, de las más esperadas por el tremendo elenco que reunió: Leonardo DiCaprio, Jennifer Lawrence, Cate Blanchette, Timothée Chalamet, Meryl Streep, Jonah Hill, Mark Rylance y hasta Ariana Grande.

Imagínense la historia de dos astrónomos que tratan de alertar sobre un meteorito que acabará con la Tierra y solo reciben indiferencia de la gente, pero sobre todo de los políticos y medios de comunicación que buscan moldear la noticia a su favor, porque claro, el fin de la humanidad es buen producto publicitario.

En realidad, no hay mucho que imaginar. Lo vemos todos los días en el mundo real.

Se trata de una sátira de la sociedad contemporánea dirigida por Adam McKay (La gran apuesta, Vicepresidente) que gustó bastante a casi todo el público al grado de posicionarse como la tercera película más vista en Netflix, pero a la crítica no convenció. De hecho, no hablan bien de ella. Por ejemplo, la revista Rolling Stone la definió como "una película de desastres en más de un sentido", mientras que The Guardia la señaló como "laboriosa".

Hubo incluso quienes tacharon de mala a la cinta por "burlarse" de la comunidad científica en su intento de ser tomados en serio. Pero señores, les recuerdo que el cine es entretenimiento y si bien es un medio que puede servir para exponer temas delicados y dejar que el espectador sea parte de ellos y tome consciencia, en realidad no tiene ningún compromiso social, no son cátedras moralistas. No está hecho para que cada filme sea una nueva revolución.

O en realidad no les gusta que presenten otra vez a Estados Unidos como el salvador y termine haciendo el ridículo, desenmascarando un sistema donde políticos, empresarios y en un punto hasta los propios científicos disfruten de la fama, la controversia y de ganar a nivel personal.

Yo me divertí. Insisto, no soy crítica. Soy una cinéfila que quiere divertirse, que quiere ver algo que la haga olvidarse por un momento del trabajo, de los problemas familiares, del Covid... una pausa a la ajetreada vida.

Eso sí, soy consciente que el elenco está increíble en cuanto a nombres y rostros, pero creo que estamos frente a una de las peores actuaciones de sus vidas. No conmueven, no te desatan todas las carcajadas del mundo, pero no puedes dejar de verlos.

¿Entonces qué hace que valga la pena ver Don't look up? Su ritmo, su final, su esencia. Esas risas que de vez en cuando produce porque en el fondo sabemos que es verdad, que no somos capaces de tomar con responsabilidad temas serios hasta que nos involucran, que preferimos mirar abajo y no mirar arriba para no mortificarnos. Nos gusta la tranquilidad, huir de los compromisos y no solo los comunitarios, también los personales. Pero duele cuando nos damos cuenta, como bien decía DiCaprio en una de sus líneas, que lo teníamos todo y de un momento a otro lo perdimos -o perderemos-.

No es un filme científico ni moralista. Es indiferente. Es una sátira. Es para divertir. Así que diviértete y quédate en casa disfrutando de una interesante cinta. Ámala u ódiala, pero vela y no seas indiferente. Encuéntrala en Netflix.

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@mara_guereca