Nosotros

CARIÑOTERAPIA

Mamá... mi curita y mi 911

CARIÑOTERAPIA

Mamá... mi curita y mi 911

Mamá... mi curita y mi 911

VANESSA BARDÁN PUENTE

Nada, pero nada, volvió a ser igual sin ti... no volví a ser la misma de antes, porque tú eras una parte de mí y una parte de mi murió contigo y eso me cambió, sin darme cuenta marcó mi alma, nadie regresa del dolor siendo la misma persona.

Ya no me siento apapachada y arropada por tu mirada y tus abrazos, no es por entrar en drama, pero, me siento como huérfana de la vida... aunque ya sea bastante mayorcita, desearía como un pollito acurrucarme bajo tus brazos y sentirme protegida, amada, contenida, aunque seamos bien adultos, añoramos que alguien nos abrace, que nos diga que las cosas van a estar bien, que nos sostengan en la angustia.

Tú eras mi curita y mi 911, cada vez que mi mundo se venía abajo, eras quien me sostenía, fuiste mi persona vitamina, me debas un gran bienestar. Desde niña me ayudaste a elaborar mi experiencia en la vida, ¿ya te ensuciaste? "deja te limpio" ¿tienes hambre? "aquí esta tu sopita" ¿tienes frio? "ven, deja te abrazo", esto me daba la sensación de sostén, de que todo iba a estar bien, fuiste mi más importante red de apoyo, la relación intensa y profunda de mi vida, disfrutabas mis alegrías quizá incluso más que yo misma y llorabas junto conmigo, nutrías mi alma y mi corazón, por eso, este cambio de vida sin ti me desestabiliza, se altera todo el orden preestablecido, dentro de mí se está gestando una revolución, ahora tengo que aprender a vivir sin tu presencia, sin tu mirada, a renacer de mis propias entrañas, aunque no tengo ni la más mínima idea de ¡cómo diablos se hace eso! este dolor me quema más que mil soles en el planeta. Mamá: ¿cómo no me vas a hacer falta? siempre me hará falta tu cariño y tus palabras, sobre todo esa parte sabia tan tuya.

Llevo presente un montón de tus frases favoritas y de tu singular manera de decir las cosas, tus recetas de cocina, tu alegría, tu actitud ante la vida, tu amorosa manera de servir a los demás, de mantener el orden dentro de la casa, de cuidar de las plantas, atesoro esto en mi corazón. Ahora me escucho hablando como tú, cocinando como tú, te llevo dentro y te veo en mí cada vez que me miro frente al espejo. Pero ¿sabes? ahora estoy aprendiendo a ser mi propia madre, a sostenerme y a vivir, a cuidarme, cuando la madrugada llega, cuando siento un poco de miedo, me canto casi en susurro, alguna canción que me de paz y así me quedo dormida y abrazada a mí, estoy aprendiendo a ser mi propia madre y a darme buenos consejos para saber cuidarme y amarme, cuando estoy triste me busco y cuando estoy feliz también.

En tu sencillez, estuvo tu grandeza y eso te hizo genial y adorada, tu existencia impactó amorosamente en todos los que te conocimos.

Gracias mamá chula, fuiste la mamá indicada para tan especial participación en mi vida, nuestras almas se conectaron con un amor grande desde nuestra primera cita, hiciste mi vida amorosamente especial, estuviste disponible y presente, me acompañaste y cuidaste de mí, hiciste lo mejor que pudiste, tengo la certeza de que lo hiciste muy bien, hiciste todo lo que podrías haber hecho. Te extraño, pero bajarte del cielo no puedo, yo sé que algún día nos volveremos a encontrar y a abrazar en un instante infinito, me iría contigo si pudiera, pero yo tengo que permanecer aquí, me quedo en la vida con tu amor y tu legado, el secreto de la felicidad es aceptar las cosas como son, te quise todos los años que estuviste y te quiero todos los que no has estado también... Gracias y hasta siempre precioso espíritu, tu memoria siempre brillará en quienes tuvimos el honor de conocerte.

Las mamás nos conformaremos con ser pensadas... Y seremos felices sintiendo que nos quieren hasta el cielo...

Dedicado a todas las benditas mamás del cielo y de la tierra en su día.

¡FELICIDADES MAMÁS!

Escrito en: CARIÑOTERAPIA vida,, hiciste, tengo, estoy

Noticias relacionadas

EL SIGLO RECIENTES

+ Más leídas de Nosotros

TE PUEDE INTERESAR

LECTURAS ANTERIORES

Fotografías más vistas