Estados Unidos tuvo un fin de semana marcado por los ataques armados que dejaron un total de 14 muertos en los hechos más difundidos, los cuales se desarrollaron en Los Ángeles, California; Houston, Texas y Buffalo, Nueva York.
La crisis de la violencia armada en Estados Unidos ha escalado en los últimos años sin que las autoridades logren legislar en la materia para obstaculizar la venta de armamento.
De acuerdo con Gun Violence Archive, una organización sin fines de lucro en la Unión Americana que lleva registro de todos los incidentes donde se están involucradas armas de fuego, en lo que va del año se han reportado 15 mil 977 muertes.
De este número siete mil 67 corresponden a homicidios y ocho mil 910 suicidios. También detalla que se han registrado al menos 200 ataques masivos y nueve de estos fueron homicidios masivos.
En el caso de Buffalo, las autoridades desarrollan la hipótesis de que el odio racial fue el motivo de la matanza en un supermercado en una zona de gran población negra en Buffalo, en el estado de Nueva York.
Clientes y un policía retirado que trabajaba como guardia de seguridad estaban entre los 10 muertos de la masacre del sábado por un adolescente blanco.
Payton Gendron, autor del tiroteo, le disparó en total a 11 personas negras en el supermercado Tops Friendly Market y transmitió en vivo el suceso antes de rendirse ante la policía.