Bienestar pausa programas
El Ayuntamiento en el municipio de Nombre de Dios ha costeado la operación del comedor comunitario que atiende la cabecera municipal.
El alcalde, Juan Fernando Solís Ríos, explicó que si bien era la Secretaría de Desarrollo Social (Sedesol), ahora Bienestar, la encargada de los gasto de operación, desde diciembre pasado la dependencia dejó de enviar las provisiones para la preparación de alimentos.
Fue entonces, que el Sistema para el Desarrollo Integral de la Familia (DIF) a nivel municipal, tomó el mando del comedor para continuar brindando el servicio a la ciudadanía.
El objetivo es mantener la preparación de las 120 raciones que se sirven cada día en favor de personas que están consideradas vulnerables por acceso a la alimentación.
El alcalde, enfatizó que se trata de un programa muy noble porque permite que las personas más vulnerables accedan a una comida caliente completa por un costo de recuperación de solo 10 pesos, lo que no sucede en ningún otro esquema de apoyo alimenticio.
Sin embargo, el presidente municipal reconoció que para las finanzas del Ayuntamiento es complicado hacerse cargo del espacio porque tienen justo el gasto corriente.
Hasta ahora, ha sido posible hacerse cargo del comedor gracias al recurso del que dispone el DIF municipal.
Es por ello, que esperan que en el corto plazo, el gobierno de la República reactive el programa, ya sea que opere bajo las mismas normas o que se emitan reglas de operación nuevas.
Sin embargo, el alcalde apunta que cada día la situación se vuelve más apremiante, toda vez que ya inició febrero y aún no ha habido ningún pronunciamiento por parte de la dependencia respecto al destino que tendrá el programa en este ejercicio fiscal.
AUMENTO DEL PROGRAMA
Guanaceví es otro de los municipios que aún espera que la Secretaría del Bienestar reactive los insumos para el comedor comunitario.
En el caso de ese municipio, el alcalde, Rogelio Ayala Arzola, apuntó que las provisiones que tenían han permitido mantener el comedor en operación durante los más de dos meses que no han recibido recursos.
Sin embargo, igual que en Nombre de Dios, esperan que el gobierno de la República emita reglas de operación para el programa que permitan mantener la cobertura.
En el caso de su municipio dijo, antes del cambio de administración se había hecho una solicitud para que la dependencia federal considerara la construcción de un nuevo comedor, ahora en la comunidad de Lajas, la segunda más grande de la región.
Sin embargo, con el cambio de gobierno y la falta de apoyo para los espacios que ya estaban operando, el Ayuntamiento aún no ha reiterado la petición al gobierno de la República.