Graves, mordidos por víboras
La mordedura de víbora requiere de atención hospitalaria urgente. Debido a su peligrosidad, no es posible brindar a la víctima un tratamiento ambulatorio, advirtió Aída Leticia Hernández Aguirre, encargada del programa Antialacrán de la Secretaría de Salud de Durango (SSD).
El año pasado fueron atendidas 67 personas que sufrieron la mordedura principalmente de la víbora de cascabel; todas presentaron un estado grave pero no hubo muertes. Al menos no documentadas por la dependencia estatal.
Es en la zona rural donde más se registran casos de ataques, por ello en este periodo vacacional podrían incrementar las mordeduras ya que muchas familias acuden a poblados o parajes para disfrutar del asueto.
En caso de ser mordido, de inmediato se debe acudir a un centro médico, indicó Hernández Aguirre. "El paciente debe estar internado porque el veneno es muy agresivo".
La zona Lagunera es la de más incidencia, sobre todo en Gómez Palacio y Lerdo, aunque en general la entidad tiene presencia de serpientes como el coralillo y la de cascabel, que es la que más ataca.
La doctora refirió que en muchas ocasiones las personas acuden a los hospitales luego de horas o días de que fueron mordidos, así que su estado de salud es más grave y son hospitalizados de inmediato. Para combatir el envenenamiento se utilizan faboterápicos y antiviperinos, de los cuales la SSD ha garantizado suficiencia para atender todas las emergencias. "De no aplicarse a tiempo pueden morir", alertó la encargada del programa Antialacrán.
Algunos de los síntomas que puede presentar una persona tras ser mordida son hinchazón, enrojecimiento y vómito. "Se va paralizando el sistema respiratorio", refirió la especialista.
Se sabe que las serpientes pueden morder cuando están en muda, en temporada de apareamiento y sobre todo al sentir estrés.
Urgente
En cuestión de horas el envenenamiento puede ser fatal, por lo que es necesario acudir de emergencia al hospital más cercano.
Solución
La Secretaría de Salud asegura que cuenta con los faboterápicos y antiviperinos necesarios. No hay desabasto.
Cuidado
Se recomienda caminar con cautela en los parajes, especialmente donde se sabe de la presencia de víboras.