Detectados 2 casos de explotación laboral

En Durango, el trabajo infantil está normalizado por usos y costumbres; sin embargo, al detectar casos, las autoridades intervienen para evitar que los niños sean violentados.

El último reporte de la Procuraduría de Protección de Niñas, Niños y Adolescentes del DIF Estatal, contempla un par de casos registrados el año pasado, los cuales según informó el titular del área, José Vidal Silerio Gamboa, fueron solucionados. En lo que va del 2019 no se han presentado.

Estos se suscitaron en la zona rural, que es la de mayor prevalencia del problema, por tradiciones ancestrales, indicó.

El trabajo infantil en los poblados se presenta sobre todo en actividades de agricultura, aunque en los dos casos documentados no se dedicaban a esto, sino a labores relacionadas con una empresa familiar.

Al recibir la denuncia, el personal del organismo habló con los padres y concilió para evitar que los niños fueran sometidos a las jornadas extensas que tenían.

Afirmó que tratar una situación así es complicado porque en la zona rural es común que los niños ayuden a los padres en la siembra u otros empleos.

“Llega a rebasar los límites de lo habitual y puede considerarse explotación, pero es una jornada laboral que han visto de sus padres, abuelos, etcétera", comentó.

Este miércoles se realizó un encuentro entre autoridades, empresarios y sociedad civil para abordar el tema del trabajo infantil, ya que este 12 de junio se conmemoró el día mundial contra esta práctica.

Según datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), en México 3.2 millones de niñas y niños de 5 a 17 años de edad trabajan en actividades económicas no permitidas o en quehaceres domésticos en condiciones inadecuadas.

La situación preocupa ya que de los niños ocupados que no cumplen la edad mínima para trabajar, 17.9 por ciento no van a la escuela y de ellos el 55.1 por ciento tiene un trabajo peligroso.