El empresario opositor Ricardo Martinelli toma hoy posesión de la Presidencia panameña de manos de Martín Torrijos en una ceremonia a la que asiste una decena de jefes de Estado, además del heredero de la Corona española, el príncipe Felipe.
La habitualmente caótica ciudad de Panamá amaneció hoy sin apenas tráfico debido al día festivo que se celebra con motivo del cambio presidencial, con todos los preparativos acabados por la ceremonia de transición de mando.
La asamblea solemne de la Asamblea Nacional de Diputados en la que tendrá lugar la ceremonia ha sido trasladada al teatro Anayansi, en el centro de convenciones ATLAPA, un lugar bastante céntrico de la ciudad mucho más adecuado por su tamaño para acoger una ceremonia de este tipo que la sede del Parlamento.
La toma de posesión está programada para las 11 horas (16:00 GMT) , y a ella está prevista la presencia de media docena de presidentes latinoamericanos, además de la del príncipe Felipe, heredero de la Corona española.
En Panamá ya se encuentran los presidentes de Colombia, Álvaro Uribe; Costa Rica, Oscar Arias; Guatemala, Álvaro Colom; México, Felipe Calderón, y la República Dominicana, Leonel Fernández, así como Felipe de Borbón, listos para asistir a la ceremonia.
También han acudido a la cita el presidente de Taiwán, Ma Ying-jeou; el presidente de la República Árabe Saharahi Democrática Saharahui, Mohamed Abdelaziz; el vicepresidente del Consejo de Estado de Cuba, Esteban Lazo, y el secretario de Interior de Estados Unidos, Ken Salazar, entre otras personalidades.
El gran ausente de la transmisión de mando democrática en Panamá puede ser el destituido presidente hondureño, Manuel Zelaya, que en principio tenía confirmada su presencia para asistir a esta transmisión de mando democrático.
Zelaya fue detenido y expulsado de su país por los militares el domingo, y a partir de entonces ha emprendido una intensa peregrinación de reuniones del Sistema de Integración Centroamericana (SICA) , del Grupo de Río, de la Alianza Bolivariana de las Américas (ALBA) de la ONU y de la Organización de Estados Americanos (OEA) , que le han expresado su apoyo.
Pese a que nunca se canceló oficialmente su visita, en círculos tanto del gobierno saliente como del entrante panameños prácticamente se descartaba que acudiera a la toma de posesión, pero en las últimas horas han surgido informaciones no confirmadas de que pudiera finalmente asistir.
La destitución de Zelaya ha centrado las numerosas reuniones que han mantenido tanto el mandatario saliente, Martín Torrijos, como el entrante Ricardo Martinelli, con las autoridades invitadas, coincidiendo en la necesidad de que se recobre la legalidad institucional en Honduras.
Martinelli, millonario dueño de la mayor cadena de supermercados de Panamá, de 57 años, ofrecerá después de su investidura un almuerzo a los presidentes y jefes de Estado asistentes.
Paralelamente, el vicepresidente y canciller, Juan Carlos Varela ofrece una recepción en honor a los jefes de Delegación no presididas por jefes de Estado, y para el Cuerpo Diplomático, organismos internacionales, ministros e invitados especiales.
Para últimas horas de esta tarde está prevista la toma de posesión de los nuevos ministros y viceministros en el Palacio de las Garzas, sede de la presidencia panameña.
Una gran fiesta popular se llevará a cabo hoy por la tarde en el remodelado gimnasio Roberto Durán, de esta capital, donde participarán varios artistas nacionales, para celebrar la asunción del nuevo Gobierno.
Martinelli toma las riendas del poder con el aplomo que otorga el haber obtenido el 59.97% de los votos en las elecciones del 3 de mayo, de un electorado que se ilusionó por su propuesta de cambio.