Mueren cinco personas en tres accidentes carreteros, una de ellas atropellada en el poblado conocido como Pajaritos, cercano a Mezquital; otra se impactó en su camioneta, de frente, contra un tractor, en Guadalupe Victoria, y las tres restantes también tuvieron un encontronazo con un camión, en la rúa que lleva de Gómez Palacio a Jiménez, informó la Procuraduría General de Justicia del Estado.
En la madrugada de ayer, en la carretera federal que conduce de Gómez Palacio a Jiménez, perdieron la vida Jorge López Lara, de 20 años; Édgar Flores Saucedo, de 25, y Marcos Lara Díaz, de 21, luego de que viajaban a bordo de un vehículo Nissan, de la línea Sentra, modelo 1993, y al llegar al kilómetro 97, se impactaron de frente contra una tractocamión Kenworth, modelo 1980, del servicio público federal, con razón social de Servicios Ecológicos y Reciclados, dándose a la fuga el operador.
Todos los fallecidos eran de Tlahualilo, de la Comarca Lagunera y fueron identificados por José Luis López Valdez, tras encontrar unos documentos a ese nombre y posteriormente descubrir que se trataba del padre de uno de ellos.
En poblado Antonio Amaro, municipio de Guadalupe Victoria, falleció de manera instantánea Francisco Alvarado Rangel, de 52 años de edad, a causa de conjunto de traumatismos, al salir a bordo de su camioneta Nissan, tipo pick-up, a la carretera aledaña a ese lugar y estrellarse de frente contra un tractor agrícola operado por Crisanto Domínguez Gómez, de 60 años, quien se encuentra a disposición de la autoridad por la responsabilidad que le resulte.
En el poblado Pajaritos, cercano a Mezquital, dejó de existir Manuel Ferrel Bautista, de 27 años, con domicilio conocido en La Peña del municipio citado a consecuencia de traumatismo craneoencefálico y toraco-abdominal, al ser arrollado por un vehículo marca Ford, tipo pick-up, de color negro, el cual era conducido por Aurelio Caldera Cervantes, de 34 años.
Los hechos ocurrieron el domingo por la tarde, cuando Manuel, en avanzado estado de ebriedad, se quedó dormido al borde del camino y cuando pasó Aurelio no se percató de su presencia, hasta que lo arrolló con las llantas, regresándose de inmediato para ver qué había aplastado, y al percatarse del cuerpo sin vida, él mismo llamó a las autoridades y se entregó voluntariamente.