Para rato, obras en museo 'El Aguacate'
El deterioro en el edificio El Aguacate, que alberga a uno de los museos más conocidos de la capital, requerirá de una remodelación que se prolongará al menos hasta septiembre.
El contrato de obra pública UJED-PAICE 001-2018 fue signado entre el rector de la Universidad Juárez del Estado de Durango, Óscar Erasmo Návar García, y la representación legal de la empresa Arquitectura y Construcciones Faro, S. A. de C. V., tras un proceso de licitación pública nacional publicada a finales de diciembre pasado.
Además de Construcciones Faro, a la convocatoria respondieron las empresas AR+Poyectos, Ingeniería del Guadiana, Construcciones Fosael, Grupo Constructor Celer, Tomomizu y Construcciones Kalmhe, así como Enrique Campos Silva y Marco Aurelio Martínez Muñoz.
El 16 de febrero se firmó el contrato por cuatro millones 246 mil 157 pesos con impuestos incluídos, como parte del Programa de Apoyo a la Infraestructura Cultural de los Estados (PAICE); mientras que la fecha de inicio de los trabajos se estableció para tres días después. Además de que se fijó un plazo de 198 días naturales para la culminación de los mismos.
Es decir, esto da como fecha de término de los trabajos el 4 de septiembre próximo.
El pasado viernes se conmemoró el Día Internacional de los Museos, para lo cual se implementaron diferentes disposiciones a fin de que la ciudadanía visitara los diferentes recintos de este tipo que hay en Durango.
Sin embargo, grupos de familias fueron vistos con la sorpresa de que el Museo Regional Ángel Rodríguez Solórzano, perteneciente a la Universidad Juárez, estaba en proceso de remodelación y, por lo tanto, cerrado al público.
Este recinto, que se ubica en la esquina de las calles Victoria y Aquiles Serdán, data de mediados del siglo XIX y se le conoció como El Aguacate por el árbol frutal que se ubica en su patio principal; desde 1988 es el museo principal de la UJED y expone cientos de piezas de diferentes momentos históricos de Durango.
Debido a las características del lugar, en la remodelación se incluyó un proceso de fumigación anti-termita con garantía de cinco años.