Durango

Construye tu futuro saludable

Chequeos y medicina preventiva para jóvenes

Construye tu futuro saludable

Construye tu futuro saludable

Junior Robles

Cuando somos jóvenes pensamos que nuestra salud será la misma en el futuro y que nunca perderemos nuestra fuerza… pero mientras pasa el tiempo, descubrimos que las cosas toman otro rumbo y que poco a poco la vida va cobrando las facturas pendientes.

Cuidarse en cada etapa es fundamental, pero durante la juventud debemos hacerlo con mayor responsabilidad; nuestros padres ya no estarán detrás de nosotros para llevarnos al doctor o persiguiéndonos para darnos la medicina.

Sí, cuando somos jóvenes pensamos que el mundo es nuestro, pero también debemos tener consciencia que esto no será para siempre y en algún momento aquellas acciones que dañaron nuestra salud en esta etapa, tendrán consecuencias.

Uno de los errores más comunes que la mayoría hacemos durante la juventud, es evitar los chequeos médicos porque pensamos que “nada malo nos pasará”… pero ¿cuáles son las consecuencias de evadirlas? ¿En la juventud hay menos probabilidades de contraer una enfermedad grave?

No importa la edad de cada quien, hacerse un chequeo permite saber el estado de salud de las personas. Se realiza con la finalidad de prevenir enfermedades y detectar sus principales factores de riesgo.

Hoy en día existen diferentes tipos de revisiones médicas, pero las más conocidas son la preventiva y la de diagnóstico; la primera está dirigido a las personas sin enfermedad previa conocida y la segunda funciona para confirmar una patología.

A pesar de que los jóvenes tienen mejores defensas y son más fuertes que los adultos mayores o los niños, no están libres de tener un padecimiento complicado. Sin embargo, ellos pueden construir un futuro saludable, todo comienza con un paso: un chequeo.

Nadie está exento

A lo largo del tiempo, la Organización Mundial de la Salud (OMS) ha investigado el estado salubre de los adolescentes de diferentes países. Según la dependencia, existen diferentes causas que desencadenan enfermedades durante la juventud; las costumbres que se realizaban en la infancia, la poca información y las acciones que se van aprendiendo en esta etapa como fumar, consumir alcohol y tener relaciones sexuales sin protección.

De acuerdo al informe, las patologías que más afectan a los jóvenes son: anemia, enfermedades de transmisión sexual (ETS), asma, ansiedad, diabetes y algunos cánceres; mismas que se pueden identificar o prevenir a través de una revisión médica.

En esta edición ordenamos los chequeos más importantes que todos los jóvenes deben hacerse. Una vez que los realicen, ellos tendrán dos opciones: estar tranquilos por los resultados o actuar de inmediato en caso de que se detecte una patología. Así que si aún eres joven, ¡no ignores esta información! Estás a tiempo de vivir con plenitud.

• Enfermedades de Transmisión Sexual

Seamos sinceros. El sexo podría ser una de nuestras actividades favoritas, ¿y cómo no? Si su práctica, más allá del placer, funciona para disminuir estrés, quemar calorías, o solo para lucir radiante al día siguiente; sin embargo, no debemos olvidar una pieza clave al momento de hacerlo: la prevención.

Las pruebas de ETS son rápidas, indoloras y a veces, hasta gratuitas; solo que no siempre forman parte de las revisiones de salud, regularmente el joven debe solicitarla con su médico de confianza. Para ello debe evaluar su vida sexual, hablar con el especialista y, lo más importante, eliminar los tabúes que pueden surgir.

De acuerdo a la OMS, las ETS afectan a uno de cada 10 jóvenes de entre 15 y 24 años. A veces son asintomáticas y al no ser tratadas, pueden tener consecuencias a largo plazo. Las más comunes son clamidia, herpes genital, gonorrea, sífilis, virus de inmunodeficiencia humana (VIH), virus de papiloma humano (VPH), tricomoniasis, hepatitis B y candidiasis.

Cada enfermedad tiene su propia prueba, por lo que el médico deberá intervenir para saber cuál será la adecuada. No obstante, los chequeos para determinar ETS incluyen: análisis de orina, hisopado (raspado) bucal y genital, análisis de sangre, reconocimiento físico y examen de llagas.

• Diabetes tipo 1

La diabetes es una enfermedad que está interviniendo cada vez más en la vida de los jóvenes mexicanos. Anteriormente era conocida como diabetes juvenil, pero ahora se le denomina como “tipo 1”.

En este tipo de diabetes, el páncreas no produce insulina, que es una hormona que ayuda a que la glucosa entre las células para darles energía. Sin ella, queda demasiada azúcar en la sangre. El sobrepeso, la obesidad y tener antecedentes en familia son algunas causas que desencadenan este padecimiento entre los jóvenes.

Los especialistas en salud recomiendan hacerse una prueba de diabetes en caso de que el joven no realice ejercicio, tenga mala alimentación, fume constante, consuma drogras, se desvele o beba demasiado alcohol.

Los chequeos varían. Algunos profesionales de la salud realizan la prueba glucosa plasmática en ayunas, la aleatoria (cuando hay síntomas y no quieren esperar a que la persona tenga ocho horas de ayuno) y la prueba A1C (análisis de sangre),

Debido a que la diabetes tipo 1 puede ser hereditaria, un estudio denominado TrialNet recomienda realizarse una prueba -incluso si no tienen síntomas- en caso de que tenga familiares con esta enfermedad.

• Anemia

Los niños y adolescentes tienen más riesgo que el resto de la población de tener déficit de hierro. Sus necesidades son mayores, debido a su mayor crecimiento. Se puede decir que la causa más frecuente de anemia se debe al aporte insuficiente de hierro en la dieta.

Para diagnosticar esta enfermedad es necesario realizar un examen de sangre para evaluar la cantidad de glóbulos rojos y de hemoglobina. Posterior a ello, se realizan varios exámenes que permiten identificar la anemia y su tipo; tales como el electroforesis de hemoglobina (identifica el tipo de anemia), frotis de sangre periférico (evalúa la apariencia de los glóbulos rojos de la sangre), conteo de reticulocitos (revisa si la médula ósea está produciendo nuevos glóbulos rojos), examen de heces (detecta una hemorragia en el estómago o intestinos), entre otros.

• Asma

Aunque este padecimiento regularmente se descubre desde la infancia, no está de más saber las revisiones que se pueden realizar para detectarlo. La realización de un examen físico y un cuestionario acerca de la salud del joven, son los primeros pasos que se deben llevar a cabo para solicitar las pruebas de capacidad pulmonar.

Dichos chequeos incluyen espirometría (mide la velocidad con que la persona puede mover el aire hacia adentro y hacia afuera de los pulmones), flujo espiratorio máximo (muestra la cantidad de aire que puede exhalar usted cuando se esfuerza al máximo) y de provocación (mide cómo se ve afectada su respiración por el ejercicio o después de tomar un medicamento).

Especialistas en salud recomiendan hacerse chequeos regulares para llevar un registro del asma y tomar decisiones con respecto al tratamiento.

• Cáncer

Esta enfermedad no conoce edad, situación social o los sueños de alguien; puede aparecer en el momento menos esperado. Según la OMS, cerca de 70 mil jóvenes de 15 a 39 años son diagnosticados con cáncer anualmente.

La dependencia afirmó que los adultos jóvenes tienen más probabilidad de padecer algún tipo de cáncer que los niños; como de cerebro, colorrectal, cuello uterino, hígado, leucemia, linfoma, melanoma, sarcomas, óseo, seno y testículo.

Se utilizan diferentes exámenes para detectar el cáncer; inclusive se ha demostrado que cuando se realiza con a tiempo, reduce la posibilidad de que suceda algo grave en el futuro, como una muerte.

En los jóvenes, regularmente se realizan exámenes para identificar diversos tipos de cáncer; como la colonoscopia (detecta crecimientos anormales en el colon), tomografía computarizada (detecta el cáncer de pulmón), mamografía (de seno) y pruebas de VPH.

Cuidarse es amarse

Cualquier persona puede realizar ciertas acciones para mantenerse saludable. Sin embargo, los jóvenes deben prestarles atención a ciertas pautas, por ejemplo:

Ejercitarse con regularidad. Los adolescentes deben realizar actividad física al menos 60 minutos al día.

Seguir una dieta saludable. Tener una alimentación sana es una parte importante del crecimiento y desarrollo.

Dormir lo suficiente. El sueño tiene un fuerte efecto sobre la capacidad de concentración y el desempeño.

Cumplir con las vacunas. Desde la juventud debemos hacernos responsables de nuestra salud.

Usar protector solar. Quemarse con el sol en la infancia o la adolescencia, aunque sea una sola vez, incrementa el riesgo de padecer cáncer de piel en la adultez.

Aprender maneras de manejar el estrés. No se puede evitar el estrés, por lo que tiene que aprender a manejarlo. Esto lo ayudará a mantener la calma y a poder actuar en situaciones difíciles.

Estudiar. Existe un fuerte vínculo entre la salud y el éxito académico.

Prestar atención al ánimo y los sentimientos. Si estás preocupado por algo, busca ayuda.

Aceptarse a sí mismo. Si tienes baja autoestima o problemas con tu imagen corporal, habla con alguien al respecto. Incluso hablar con un amigo puede ser de utilidad.

Evitar el consumo o abuso de sustancias. Se incluyen el alcohol, las drogas callejeras, los medicamentos con receta de otras personas y cualquier tipo de producto que contenga tabaco.

Tener sexo seguro. Si mantienes relaciones sexuales, siempre usa preservativo para no contraer ETS.

En agosto celebramos a todos los jóvenes del mundo, por eso en este y todos los meses disfruta con precaución. Esta es una de las etapas más memorables de cada persona, por eso es importante no dejar a un lado nuestra salud. ¡Cuídate!

Escrito en: PREVENCIÓN jóvenes juventud jóvenes, salud, chequeos, tener

Noticias relacionadas

EL SIGLO RECIENTES

+ Más leídas de Durango

TE PUEDE INTERESAR

LECTURAS ANTERIORES

Fotografías más vistas