Todas contra las 'Juanitas'
Cuántos años de lucha para avanzar en la igualdad y equidad entre mujeres y hombres, cuántos esfuerzos emprendidos para ir encontrando espacios de voz y participación para nosotras, para que en pleno siglo XXI estemos viviendo la utilización tan absurda y ruin de 35 mujeres chapanecas.
Este suceso por demás abusivo y que tiene que ver con la arbitrariedad del poder, de quienes buscan sus propios intereses, lejos de privilegiar el bienestar social.
Ha sido sorprendente lo que ha emprendido el gobernador de Chiapas, Manuel Velasco, y que con justa razón, le ha llovido el topeteo en redes sociales y espacios de análisis, pues el señor acomodó las leyes en su estado para ser senador y luego regresar como mandatario.
Luego del enredo que proyectaron los senadores de Morena, justo hace ocho días. Primero votando en contra de la licencia de Velasco, luego a favor. ¿A cambio de qué?: de que los cinco diputados federales del Verde se trasladaran a la fracción mayoritaria de Morena. Y claro que estos legisladores serán muy importantes para las reformas constitucionales que pretende hacer el nuevo gobierno de Andrés Manuel López Obrador.
Pero el tema no ha parado ahí, no conforme con todo lo anterior, como jefe de la entidad Chiapaneca, ahora, Manuel Velasco observa cómo 35 mujeres, sospechosamente, están renunciando a sus curules y regidurías, cuyos motivos no han quedado claros, y que deben de ser investigados de inmediato, pues son un ejemplo palpable de misoginia en la cultura y prácticas políticas que vulneran la democracia.
Es un evidente caso de violencia política contra las mujeres que se dedican a este quehacer, con el fin de mantenerlas al margen y, por supuesto, una clara violación a la Constitución Mexicana que consagra la paridad en todo el País, por lo que este acto de discriminación no debe permitirse.
Diversas asociaciones como La Red de Mujeres Plural y diferentes actores han levantado la voz en repudio a este acto, cuya fuerza debe redituar en resultados favorables, como ha sido ya que un par de estas mujeres afectadas hayan dado marcha atrás a su renuncia.
Una mujer que ha hecho eco al respecto es la exsenadora Yolanda de la Torre, duranguense que ha sido una verdadera defensora de la violencia política en México, quien manifestó su confianza de que las autoridades electorales evitarán semejante atrocidad antidemocrática en Chiapas, y que será un referente para que estas prácticas no se repitan en ningún lugar de nuestro País.
En Durango, tenemos un congreso local integrado por 40 por ciento de mujeres, con la salvedad de que, históricamente, hoy la Junta de Coordinación Política es presidida por una legisladora, Sandra Amaya Rosales, mujer que se ha caracterizado por buscar la equidad de su género, a los largo de su trayectoria. Mucho se lograría que, independientemente, del partido al que pertenezcan, todas, lograran encaminar trabajos en favor de la las mujeres, pues muchos son los abusos que se cometen en diferentes ámbitos.
De Morena, cuatro de 10, son mujeres; además de Sandra Amaya Rosales, están Fernanda Pérez Herrera, Elia del Carmen Tovar Valero y Nancy Carolina Vázquez Luna. Por el Partido del Trabajo, dos de cuatro, Claudia Julieta Domínguez Espinosa y Cinthya Leticia Martell Nevárez. Del PRI, tres de cinco, Gabriela Hernández López, Alicia Gamboa Martínez y Sonia Catalina Mercado Gallegos. Finalmente, en el PAN, sólo una de cinco: María Elena González Rivera.
Si bien, no hay una igualdad exacta en la representación legislativa local, 10 mujeres pueden generar considerable trabajo a favor de innumerables temas que atañan a este sector de la población, como es el caso de la Violencia Política y otros rostros más que vulneran los derechos humanos de tantas mujeres... por hoy, todas levantemos nuestra voz contra las "Juanitas".
TW: @ArlnContreras