Cierre. La empresa minera ya dio a conocer a sus 450 trabajadores el cierre a corto plazo de la misma ante la imposibilidad de seguir descargando sus jales.
Ahora son los trabajadores de la empresa minera de San José de Avino quienes piden apoyo al Gobierno del Estado porque ya les anunciaron el pronto cierre de la mina ante la imposibilidad de seguir trabajando por no tener dónde depositar los jales.
Un grupo de trabajadores mineros acudieron a El Siglo de Durango y pidiendo el anonimato, porque algunos son habitantes de las comunidades más cercanas a la mina, señalaron que en esta ocasión los pobladores se están equivocando.
Explicaron que hace varios años, cuando se paró por primera vez la minera por la construcción de la presa de jales cerca del poblado, los habitantes de Pánuco de Coronado tenían la razón, por el riesgo que podría existir de un desbordamiento.
BUSCAR OTRAS POSIBILIDADES
Sin embargo, en el 2019 alguien de los mismos pobladores llegó a señalar que había otras posibilidades de instalar los jales en seco, que se buscara esa posibilidad, pero que una presa de jales como se conoce, no la aceptarían.
Uno de los trabajadores de la mina, quien parece conocer más al respecto y haber estado en ambos movimientos dijo que la presa de jales a construir en aquel tiempo era 60 por ciento agua y 40 por ciento de rocas molidas.
DEPÓSITO DE JALES EN SECO
Pero como el pueblo no la quería así, en el 2020 se empezó a trabajar en otra alternativa y para el 2021 se inició el proyecto de un depósito de jales en seco.
Este depósito tiene un equipo muy caro que permite lavar en seco todo lo que se extrae de las minas y lo hace dentro de la misma y lo que sale del interior es sólo roca molida en seco, sin agua.
Esa roca molida se compacta y es como si se compactara arena o escombro en seco, se eliminó el riesgo de un desbordamiento de los lodos que pudieran llegar y afectar no sólo a poblados, sino al medio ambiente, ríos o arroyos.
"La empresa invirtió una fuerte cantidad en dólares para comprar este equipo y otra fuerte cantidad para su instalación, en la compactación y en los permisos, porque se tienen que cumplir ciertos requisitos para su instalación y funcionamiento", señaló uno de los trabajadores.
NO EXISTE RIESGO A TERCEROS
Esa es la razón por la cual el depósito de jales en seco no pone en riesgo a nadie y es algo que los pobladores de Pánuco de Coronado que se oponen deberían de entender, "no hay ningún peligro", aseguraron.
Sin embargo, como los mismos pobladores se han encargado de bloquear y evitar que se sigan tirando jales en seco y compactando, la directiva de la empresa San José de Avino ya mandó una circular a todos los trabajadores de que en corto plazo cerrará sus puertas para que empiecen a buscar trabajo.
LLAMADO AL GOBERNADOR
"Ahora venimos nosotros a pedirle al Gobernador en nombre de las 450 familias que dependen de esta empresa que ya haga lo que tenga que hacer, lo han cerrado ni clausurado la mina porque no está violando ningún reglamento, porque está cumpliendo con todo, entonces, el Gobernador debe de hacer valer la ley y permitir que la mina trabaje sin ninguna presión de nadie", comentaron los trabajadores.
Explicaron que son 450 los trabajadores directos que están en la mima pero que empleos indirectos son otros mil 350 que también dependen en mucho de la mina y que se verían afectados con el cierre de la misma.
El anuncio se dio el lunes y durante toda esta semana se muestra una actitud muy diferente de los trabajadores, incluso con distracciones porque están pensando más en qué hacer una vez que se cierre la mina.
QUE HAGAN VALER LA LEY
"Que el Gobernador haga valer la ley, si todo está en orden y en regla, porque por un grupo de unas cuantas personas le van a dar la torre a cientos de familias", agregaron.
Incluso, este conflicto ha sobrepasado el ámbito laboral porque varios de los trabajadores viven en la misma comunidad de Pánuco de Coronado y han existido amenazas y agresiones verbales a los hijos de los mineros.
Temen que, de seguir este problema, este conflicto pase a ser un problema social que al rato se convierta en rencillas familiares.
Los 450 trabajadores directos de la mina tienen sus familias en varias comunidades de los alrededores, empezando por el mismo Pánuco de Coronado, en San José de Avino, Ignacio Zaragoza, Librado Rivera, Hermenegildo Galeana, Francisco R. Serrano, Lázaro Cárdenas, Francisco I. Madero, Javier Minas y López Mateos.
DEPENDEN DE LA MINA
Y muchas de las familias de estos poblados dependen de que siga trabajando la mina para subsistir porque en la zona, explicaron, no hay otra fuente de empleo.
Actualmente los pobladores de Pánuco de Coronado mantienen su plantón para evitar que se saquen los jales del interior de la mina y se depositen cerca de la comunidad.
Los pobladores han señalado que ese trabajo se puede realizar, pero en otro punto, lejos del poblado, pero a decir de los mineros, hacerlo a estas alturas es incosteable ya para la mina que acaba de invertir en este depósito de jales en seco.
En el pasado mes de junio, Román Galán Treviño, representante federal de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) reconoció que en las visitas que han realizado a la empresa minera no se ha detectado ninguna irregularidad en el funcionamiento del depósito de jales en seco.
450 Empleados directos dependen de la operación de la mina San Joé de Avino.