Mipymes: cambio de prioridades
Luego de que en el sexenio de López Obrador se dejó de apoyar a las micro, pequeñas y medianas empresas (mipymes), anteponiendo la idea de continuar con la dispersión de recursos económicos de los programas electoreros, la presidenta Claudia Sheinbaun ha dado un giro radical a esa postura, al considerar a las mipymes como el pilar fundamental de su Plan México y reconociendo a estas como el más importante motor de nuestra economía.
Las mipymes son el grupo al que pertenecen más del 99.8% de las empresas del país. Se estima que son responsables del 72% de los empleos que hay en México y son fuertes generadoras de la riqueza de nuestra nación. De acuerdo a cifras del INEGI, se estima que hay 4.9 millones de mipymes en el país. De esa cantidad, 1.2 millones nacieron en el 2021 y contribuyen con el 52% del PIB.
El expresidente Enrique Peña Nieto comprendió la importancia que representa este sector dentro de la economía nacional y creó, en el año 2013, el Instituto Nacional del Emprendedor (INADEM) que se encargaba de diseñar y operar las más importantes políticas públicas para apoyar a las mipymes y a los emprendedores mexicanos a través de una gran diversidad de programas, entre otros, el acceso al crédito de la banca comercial; la incubación, creación y constitución de empresas; el desarrollo de planes de negocios; el acceso a los mercados nacionales e internacionales; y apoyos específicos para el registro de marcas comerciales y el desarrollo de planes de mercadotecnia.
En cambio, para López Obrador, pudo más el tema ideológico y la cicatriz con la que fomentó la polarización entre chairos y fifís para reducir el apoyo empresarial a su mínima expresión. El 8 de agosto de 2019 se publicó en el Diario Oficial de la Federación la desaparición del INADEM, para en su lugar impulsar el programa Jóvenes Construyendo el Futuro. No se desplegaron durante su mandato estrategias de apoyo o desarrollo empresarial.
Durante la pandemia decidió que las personas y las empresas sobrevivieran con sus medios, como "animalitos del bosque" (David Páramo dixit). No hubo apoyos ni condonaciones fiscales y dijo que así habría que rescatar a alguien sería a los pobres.
Lo único que hizo fue el otorgamiento de las llamadas Tandas del Bienestar, que fueron solo un mejoralito para las mipymes, por lo que más de un millón de mipymes desaparecieron durante la pandemia.
Somos el país de la OCDE (Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos) que menos apoyó a las personas, menos apoyó a las mipymes, que menos apoyó a las grandes corporaciones. Somos el país de la OCDE que menos se ha recuperado del Covid-19.
La semana pasada, en el marco de la 88ª Convención Bancaria, la presidenta Sheinbaum promovió la firma de un Acuerdo, entre los bancos y la Secretaría de Hacienda para apoyar las mipymes. Se formarán 7 equipos de trabajo para aterrizarlo tanto en materia de desregulación de trámites por parte de las autoridades financieras; de garantías mínimas de 70% por parte de la banca de desarrollo; de medidas para fomentar la formalización de las empresas; mayor coordinación con los tres niveles de gobierno; e inversiones para una mayor digitalización y uso de las plataformas de pago electrónicas.
Este Acuerdo, insertado dentro del llamado Plan México, se propone financiar con créditos al 30% de las mipymes y una mayor inclusión financiera y digitalización de medios de pago, no será un catálogo de buenas intenciones porque establece compromisos que tendrán que cumplir no sólo los bancos privados, sino también la banca de desarrollo, y las autoridades financieras.
Con estas acciones, la actual Administración federal, de un cambio de rumbo y se desmarca de las políticas ideológicas de su antecesor y manda un claro mensaje para los tres órdenes de gobierno (federal, estatal y municipal): apoyar a las mipymes, principal motor económico del país.
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