Tras 17 años de guerra en Oriente Medio, Estados Unidos (EU) está por iniciar el repliegue de tropas no sólo en Siria sino también en Afganistán.
Bajo la consigna de que "EU no será (más) el policía de Oriente Medio", el presidente Donald Trump defendió ayer su decisión de sacar de Siria -país en guerra civil desde hace 7 años- los 2,000 soldados regulares y mercenarios desplegados para combatir al Estado Islámico y respaldar a milicias kurdas y rebeldes sirios.
La decisión ha desatado un "terremoto" en el gobierno de EU, en donde no se comparte la visión del presidente, así como entre los aliados de la coalición internacional, principalmente Reino Unido y Francia.
En medio de la tormenta, James Mattis presentó el jueves su dimisión como secretario de Defensa, aunque su salida se hará efectiva en febrero.