Una de las actividades económicas que tuvo mayor crecimiento y rendimiento económico para México lo es, sin duda ninguna, el Turismo, pues este creció a niveles importantes y nuestro país pasó a ocupar el 6o. peldaño de los países más visitados, con 39 millones de turistas extranjeros. Una aportación al Producto Interno Bruto del 8.8% y un promedio de 10 millones de empleos directos e indirectos.
Lamentablemente, el Gobierno de la República o, de la Cuarta Transformación, no ha entendido la trascendencia de la actividad turística y la oportunidad de desarrollo económico para varias entidades federativas y municipios, de tal suerte que lejos de consolidar este crecimiento, se propone desacelerar la actividad con una disminución de un 50% al presupuesto de la Secretaria de Turismo, al pasar de un ejercicio 2018, de 2,900 millones, a un presupuesto 2019 de tan solo 1,338 millones de pesos.
De manera espectacular destaca la desaparición del Consejo de Promoción Turística de México (CPTM), organismo centralizado a la Secretaría de Turismo y que tiene o tenía como función fundacional el generar campañas de promoción para ser difundidas en el extranjero y al interior de nuestra República, para incentivar los flujos turísticos domésticos e internacionales.
Esta desaparición puede considerarse como un golpe, necesariamente mortal, al sostenimiento y crecimiento de la actividad turística de México y tendrá efectos en lo Nacional, en los Estados y Municipios, pues de manera anual las Entidades Federativas y el CPTM convenían presupuestos financieros para ejercerse en la promoción (nacional e internacional) de cada uno de nuestros destinos y atractivos turísticos.
La desaparición del muy exitoso programa de Pueblos Mágicos, que se creó para poner en valor el patrimonio cultural, artesanal, histórico, gastronómico, natural y generar fuentes de empleo en varios rincones de nuestra patria, pero además, de generar una oferta adicional al exitoso producto de Sol y Playa. Hoy ese programa desaparece presupuestalmente y, los ahora 121 Pueblos Mágicos, no recibirán un solo centavo para consolidar su infraestructura, su producto y su promoción turística.
Queda en el aire el financiamiento de lo que todavía se denomina "Tianguis Turístico", la más importante Feria Turística de Latinoamérica, cuya edición número XLIV, quedó programada para el mes de abril del presente año, en el belicoso Puerto de Acapulco.
Por lo que hace a la necesaria conectividad aérea, que incide directamente en el crecimiento de los flujos turísticos, la incertidumbre de la construcción del Nuevo Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México, no solo desincentiva la llegada de más visitantes a nuestro país, sino el flujo turístico nacional y condena al subdesarrollo a varias entidades federativas que hoy no pueden tener acceso a nuevos vuelos - frecuencias, como ejemplo el caso Durango, que tendrá que esperar un muy largo periodo para pensar en una nueva ruta a la CDMX, no operada por AEROMEXICO.
Por lo que hace a la actividad turística de Durango, de entrada, ya no recibirá la participación financiera adicional que recibió en el año 2017, por un monto de 24 millones y la del 2018, de 35 millones de pesos, a través de los denominados "Convenios de Coordinación Fiscal" o "PRODERMAGICO".
Evidentemente los Pueblos Mágicos de Nombre de Dios y Mapimí, quedan a la deriva, o sujetos, exclusivamente a la asignación presupuestal del Gobierno del Estado de Durango. Circula un documento en el que el Congreso del Estado, asignaría una partida presupuestal para 2019, por un monto de 30 millones de pesos, en favor del Pueblo Mágico de Nombre de Dios, Dgo.
En el 2018, la Secretaria de Turismo del Gobierno del Estado de Durango y la Federal, convivieron la mezcla de recursos por un monto de 35 millones de pesos, de los cuales se aplicarían 15 millones para la recuperación del centro histórico de Nombre de Dios, en su segunda etapa; Otros once millones de pesos, para la construcción del corredor Cultural "Dolores del Rio", ubicado en la calle Hidalgo, en su tramo que va de la Calle 5 de Febrero a la Avenida 20 de Noviembre. Justamente se eligió este nombre en virtud de la casa que habito la insigne primerísima actriz Duranguense, Doña Dolores Asúnsulo y López Negrete, nuestra ilustre Dolores Del Rio; y el resto se aplicaría en uno de los Productos Turísticos más consolidados de nuestro Estado, a saber, el Parque Temático "Paseo del Viejo Oeste" que ya aqueja un grave deterioro.
Debe advertirse que, derivado de la desaparición del Consejo de Promoción Turística de México, Durango como destino turístico ya no contara con recursos financieros para la promoción, la cual es fundamental para dar a conocer los principales atractivos turísticos de nuestro Estado e incrementar el porcentaje de ocupación hotelera, queja reiterada del Presidente de los Hoteleros.
La actividad turística de México y de Durango, es impensable sin la promoción, pues no hay que olvidar los tres grandes elementos de la actividad turística; "Producto Turístico - Conectividad - Promoción". Sin la promoción de esta triada perfecta, los flujos turísticos irán a la baja.
Finalmente, debe señalarse que, la construcción del Tren Maya, es un acierto, a condición de que se construya con visión de sustentabilidad y no quite recursos al desarrollo turístico del norte del país, lamentablemente, queda como triste realidad, el desamparo financiero de los Estados del Norte de México... así no.