¿Es adecuado el uso de exfoliantes para la piel?

Existen diversas opciones cosméticas para realizar la exfoliación de la piel, sin embargo muchas de ella son inadecuadas e incluso perjudiciales para la piel, a continuación les dejo algunos consejos dermatológicos para hacerlo de forma correcta.

Cuando hablamos de microexfoliación nos referimos a eliminar las capas de células más superficiales de la piel. Cuanto más profesional es el sistema, la exfoliación es más profunda. Se puede conseguir mediante una exfoliación mecánica (microesferas), con esponjas de superficie rugosa, guante de crin, o aparatología de uso doméstico que realiza un masaje con un producto exfoliante y un aparato masajeador.

Cuando se trata de una exfoliación química, hablamos de diferentes ácidos como el glicólico, láctico y salicílico. Estas sustancias deshacen las uniones entre las células lo que favorece la descamación. Aunque la dosis utilizada en cosmética para uso en casa suele ser baja, podría tener efectos adversos en pieles sensibles o con dermatitis: enrojecimiento, quemaduras, irritación o inflamación.

Las irritaciones también dependen de la frecuencia con la que se utilicen estos productos: en caso de piel sensible, hay que consultar al dermatólogo antes de utilizarlos. En caso de realizarlas, se recomienda que sea de forma suave y durante periodos cortos de tiempo. Las pieles secas no deberían aplicarlos más de una vez por semana, y las mixtas, entre una y dos.

La piel grasa y acnéica merece una atención especial, pues es un error pensar que cuanto más se exfolie esta piel, mejores resultados se obtendrán, ya que en ocasiones podría ocasionar un efecto rebote y producir más grasa. Sin embargo, en la zona T de la cara sí podría aplicarse un producto exfoliante diariamente (a menos que posea altas concentraciones químicas).

La forma de aplicación es mediante masajes circulares suaves por un par de minutos. La mayoría de los productos en el mercado se enjuagan con agua, sean tipo gel, crema exfoliante, o mascarilla. Es importante evita las zonas sensibles como el contorno de ojos, labios, cuello y escote.

En las clínicas dermatológicas suelen utilizarse microdermoabrasión y mascarillas con principios activos más altos que los de venta al público. También se realizan peelings químicos de grado profesional a base de alfa o betahidroxiácidos. La limpieza de la piel en cabina, mediante vapor, no es una exfoliación pues elimina algunos puntos negros, sin embargo en caso de acné podría empeorar las lesiones.

En general se sugiere evitar las exfoliaciones, limpiezas o "faciales" frecuentes ya que el traumatismo que generan en la piel puede ser causante de secuelas como manchas o cicatrices, para mayor información acude con tu dermatólogo de confianza.

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Dra. Dalia Rodríguez

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