Obra observada desde 2017
Si bien el municipio de Súchil reporta un buen nivel de cobertura en servicios básicos, el alcalde, Jaime Sarmiento Minchaca, apuntó que el drenaje y el saneamiento son dos de los temas pendientes.
Uno de los temas más complejos tiene que ver con una obra de drenaje y saneamiento que se encuentra parada desde 2017 en la comunidad de San Miguel de la Michilía, en la zona indígena.
"En concreto tenemos una obra de 2017 detenida por una observación de la Profepa (Procuraduría Federal de Protección al Ambiente) pero ahí entendemos que la empresa que la construyó tendrá que resolver la observación en coordinación con la CAED (Comisión del Agua para el Estado de Durango) para que esté en funcionamiento, en este momento no está en funcionamiento", resaltó.
Sin embargo, apuntó que el hecho de contar con una obra observada por Profepa, la cual no ha sido solventada y no está en operación dificulta a las autoridades municipales la gestión de recursos para nuevas obras de drenaje en las comunidades.
Es por ello, que el Ayuntamiento espera que en breve se solvente la observación, no solo para poner en marcha la obra, también para acceder a mayores recursos para la red de drenaje.
"Son sistemas que se construyen y quedan un buen tiempo sin funcionamiento y esa es la preocupación pero entiendo que la CAED está poniendo cartas en el asunto", destacó.
Sarmiento Minchaca destacó que la zona indígena en el municipio de Súchil es la que presenta mayor rezago en cuanto a la cobertura de servicios básicos, apuntó.
Sin embargo, al cierre del ejercicio fiscal, se prevé que solo en la comunidad indígena de La Peña no habrá iniciado al menos la primera etapa de la red de drenaje, explicó el alcalde.
"Las demás, ya de alguna manera están aunque sea con una primera etapa de alcantarillado".
Sobre las redes de agua potable, el alcalde apuntó que se tiene la infraestructura pero la disponibilidad del líquido sigue siendo un problema en la mayoría de las comunidades, tanto de la zona indígena como del resto del municipio.
En el caso del municipio de Súchil, como sucede en otros Ayuntamientos, buena parte de las obras se ejecutan con recursos del Ramo 33.
Para 2019, dicho Ramo estará operando con las mismas reglas de operación de 2018, es decir que se enfocará en el desarrollo de servicios básicos, como son agua potable, drenaje, saneamiento, electrificación y vivienda en las Zonas de Atención Prioritaria (ZAP) identificadas por el Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo (Coneval).
"Tenemos un promedio de cinco millones 400 mil pesos en este aspecto, operando con las reglas del Ramo 33 en 2018", señaló el alcalde.