Era legalmente inadmisible para Enríquez sostenerse como alcalde-candidato
Hizo bien José Ramón Enríquez en solicitar licencia para ausentarse de la presidencia municipal por los próximos 45 días, ya que en el ejercicio de la gobernabilidad no pueden fijarse horarios de trabajo, porque las decisiones cruciales se toman a cualquier hora, como en una contingencia, por ejemplo. Por ello, la figura alcalde-candidato se contrapone y, en términos prácticos, va en contra de la Constitución.
Un presidente municipal es elegido por un periodo de tres años, ahora con posibilidad de buscar la reelección, pero su nombramiento se mantiene 24/7 durante todo el trienio. Es decir, en el supuesto caso de una emergencia o necesidad de decisión posterior a las 4 de la tarde, José Ramón Enríquez no habría podido justificar que en ese momento era candidato y no alcalde. E´l había planteado estar al frente de la alcaldía hasta esa hora y después fungir como candidato de Movimiento Ciudadano.
Ante una eventualidad, un presidente municipal en funciones podría enfrentar la acción de la justicia por no ejercer la responsabilidad otorgada por la ciudadanía, en cualquier caso. Por eso, Enríquez Herrera hizo bien en escuchar a quienes le advirtieron del craso error que cometería si se empeñaba en mantenerse en una dualidad tan incongruente.
La responsabilidad de la alcaldía recayó ahora en Carlos Epifanio Segovia, un joven empresario local que se había alejado de la tercera regiduría, porque así lo había pactado con su suplente Giovanni Quiñónez Sadek. Es un cercano colaborador del alcalde con licencia, al grado que renunció a su militancia panista para asumir el liderazgo de los jóvenes en Movimiento Ciudadano.
Así, la noche de este jueves se convirtió en el tercer alcalde del municipio de Durango. En el anterior periodo de licencia solicitada por Enríquez Herrera -cuando contendió por la senaduría de la que también se alejó para regresar al cargo inicial- tomó las riendas del despacho Alfredo Herrera Duenweg, actual titular de la Secretaría de Recursos Naturales y Medio Ambiente del gobierno del estado.
Por cierto, esos meses que Herrera Duenweg estuvo al frente del Ayuntamiento se caracterizaron, según lo denunció él mismo, por una paralización parcial de las actividades en las distintas áreas de la administración, ya que algunos funcionarios nunca tuvieron la disposición de unir esfuerzos y trabajar al ritmo que trató de imponer el presidente municipal sustituto.
Ahora, un día antes de la llegada de Carlos Segovia a la alcaldía, habían anunciado ocho cambios en el gabinete municipal, entre enroques y la llegada de nuevos funcionarios. A estas alturas, ya se dieron cambios adicionales, tras la inclusión de algunos cercanos colaboradores de José Ramón Enríquez a su campaña proselitista. Total que, durante un mes y medio, Carlos Segovia sobrellevara´ el ritmo de un gobierno municipal colmado de reemplazos, algunos de estos sin experiencia alguna para el desempeño del cargo y, en general, la única expectativa deseable es que en esta etapa no se cometan equivocaciones irreparables que afecten a la ciudadanía. Sería demasiado pedir cumplimiento de metas, en este periodo de 45 días, a quien quedó como responsable de un gobierno en forma por demás sorpresiva. Es difícil que 24 horas antes, Carlos Segovia hubiera imaginado siquiera la realidad que vive a partir de la noche del jueves, como tampoco la sociedad duranguense. Pobre de nuestro municipio.
COLMILLOS Y GARRAS
Y CONTRARIAMENTE A los intereses del Partido Acción Nacional, la regidora Claudia Hernández Espino se abstuvo de votar en contra de la propuesta para que Carlos Epifanio Segovia se convirtiera en presidente municipal sustituto durante la sesión extraoficial de Cabildo, el pasado jueves. Los demás panistas, en contraste, si´ votaron en contra del nombramiento... YA SABE, ENTONCES, el candidato panista a la alcaldía, Jorge Salum Del Palacio, lo que puede esperar de su oficialmente compañera de partido, pero adversaria en la práctica y muy cercana aún al proyecto político del actual gobierno municipal... LUEGO DE UN mes de estar vacía, finalmente se ocupó la curul que dejó Otniel García Navarro, del Movimiento de Regeneración Nacional, en el Congreso del estado. Julia Peralta García es la nueva diputada local, una vez que que Iván Ramírez Maldonado, suplente de Otniel García, se negó a ocupar el cargo.
Twitter @rubencardenas10