Dos poemas
SOLEDAD
La inmensa soledad es una fuente
con claros horizontes de vacío,
espuma que se escurre del navío
en la curva final de una pendiente.
Libera con mandíbulas y dientes
la cuerda de relámpagos y ríos
al borde de afilado desvarío,
al filo desbordado de la mente.
Y sola se desangra en la hojarasca,
con húmeda mirada acariciante
-La inmensa soledad es un instante-
que muerde el corazón en la borrasca.
Es rosa de los vientos que se atasca
en la sombra de luna trashumante.
MARINERA
Como los labios en la nostalgia,
-barca que viene-
Así gaviotas de madrugada surcan las piedras,
las aguas calmas,
las hondas ondas,
-barca que viene-
Como la lluvia tras la ventana
y se reflejan en las arenas,
en las cortinas, en las cortadas
alas del viento,
en los cantares de la fogata
-barca que viene
de soledades aletargada-
Y con el sueño que nos amarra
de los maderos que arrastra el agua,
blancas gaviotas
hacen su nido, bajo la sombra,
bajo la nada,
bajo los siglos de amor lejano?
en el exilio de la mirada.