Editoriales

Jaque Mate

Un plan para Pemex

Jaque Mate

SERGIO SARMIENTO
"Sembrar el petróleo. Ese es el plan que tenemos".

Andrés Manuel López Obrador

El tan esperado plan de rescate de Pemex se dio a conocer ayer y decepcionó. No solo faltaba mucha información para el plan de negocios de una empresa en dificultades, sino que la propuesta quedaba lejos de ofrecer una solución real. No sorprende que el peso haya perdido terreno.

La producción de crudo de Pemex ha caído de 3.4 millones de barriles diarios en 2004 a 1.7 millones en mayo de este 2019. El gobierno ha ordeñado a la empresa durante décadas con una estrategia absurda de utilizar un recurso natural no renovable para subsidiar el gasto corriente. Hoy Pemex es la petrolera más endeudada del mundo, con un pasivo de 106 mil millones de dólares.

En junio Fitch Ratings bajó la calificación de la petrolera a BB+, por debajo del grado de inversión. Si otra calificadora toma la misma decisión, muchos fondos se verán obligados a vender los bonos de la empresa, ya que por reglamento deben mantener sus recursos en documentos con grado de inversión. La venta forzada de deuda podría alcanzar los 16 mil millones de dólares (Reuters).

El plan de negocios dado a conocer ayer por el director general, Octavio Romero Oropeza, un ingeniero agrónomo sin experiencia previa en la industria petrolera, no resuelve los problemas más importantes. Pemex gozará de una disminución de su carga fiscal de 128 mil millones de pesos entre 2020 y 2021 y obtendrá un subsidio a cargo del erario de 148 mil millones entre 2020 y 2022. Los montos parecen importantes, pero suman menos de 14 mil millones de dólares. No le hacen mella a la deuda de la empresa.

La verdadera solución no radica en reducir la carga fiscal o darle un subsidio a Pemex, sino en aumentar su producción de petróleo crudo y su rentabilidad. Las medidas que Pemex ha anunciado, sin embargo, no cumplen con estos objetivos.

La empresa se ha comprometido a enfocarse a la producción en aguas someras. Se entiende porque es más fácil y barata y porque es la actividad en que Pemex tiene mayor experiencia. Pero las reservas de aguas someras no son suficientes para mantener una recuperación de la producción de largo plazo. Para eso se necesita desarrollar también los yacimientos de aguas profundas, que requieren de inversiones de empresas privadas extranjeras con experiencia y tecnología, y la producción en tierra, que precisan de técnicas de fractura hidráulica o fracking.

El presidente, sin embargo, no quiere ya inversión privada en petróleo, ya sea en farmouts de concesionarias o en alianzas con Pemex. Los nuevos contratos con empresas privadas serán solo de servicios, por lo que el riesgo completo quedará en Pemex, pésima decisión para una empresa tan endeuda. El mandatario también rechaza el fracking por razones políticas, ya que no entiende los verdaderos riesgos ambientales de las distintas formas de producción. Pemex, por otra parte, está manteniendo el proyecto de inversión de la refinería de Dos Bocas, que aunque costara solo 8 mil millones de dólares, cosa altamente improbable, destruiría valor para Pemex en vez de generarlo.

En los próximos días veremos la reacción de los mercados a este plan de negocios. Muchos especialistas necesitan más información de la que se dio. Una presentación de Power Point no es un verdadero plan de negocios. La información disponible hasta este momento sugiere, sin embargo, que Pemex continúa en camino de perder el grado de inversión.

Alfonso Romo, jefe de la Oficina de la Presidencia, me dice a través de WhatsApp: "Te comento que no pertenezco al consejo de Vector desde 2002, tampoco mis hijos están". Carlos Urzúa, ex secretario de hacienda, afirmó en su entrevista de Proceso que la permanencia de Romo o de sus familiares en el consejo de Vector generaba un conflicto de interés.

Twitter: @SergioSarmiento

Escrito en: Jaque Mate Pemex, millones, plan, producción

Noticias relacionadas

EL SIGLO RECIENTES

+ Más leídas de Editoriales

TE PUEDE INTERESAR

LECTURAS ANTERIORES

Fotografías más vistas