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Agua, tierras y neoliberalismo en La Laguna

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JULIO CÉSAR RAMÍREZ

En La Laguna el neoliberalismo quedó entrampado en sus propias limitaciones: estanca la región. A tal conclusión llega Héctor Ehrenzweig, ciudadano de Torreón, en la quinta y última parte del escrito que nos envía "¿A quien debe beneficiar el agua disponible de la Comarca Lagunera?".

Enfatiza: En el año 2002, se presentó el trabajo "Programa para la capacitación a usuarios de riego con aguas de origen subterráneo", realizado por la Universidad Autónoma de Chapingo, Departamento de Irrigación - Comisión Nacional del Agua (Conagua), financiado por el Banco Mundial, con los siguientes datos del balance de agua subterránea del acuífero Principal Región Lagunera:

El volumen de lluvia fue de 91.0 millones de metros cúbicos por año; las entradas horizontales, 260.8; el exceso de riego más otros, 150.1; así, el total de recarga fue de 518.3. La extracción bruta, 930.9; las salidas horizontales, 0.0; la descarga, 930.9. El minado o sobreexplotación, -402.6.

"Con este manejo de agua subterránea podemos sospechar que debe haber complicidad entre las instituciones interesadas en el neoliberalismo y los usuarios principales que son los agroempresarios neoliberales."

En el cuadro de condición geohidrológica en la Región VII, correspondiente a déficit de recarga, la extracción llega casi a 1000 millones de metros cúbicos, la recarga es poco superior a 500 y el déficit es cercano a 400.

Con datos de la Conagua, identifica problemas en dicha región hidrológica: Poca y deficiente infraestructura hidroagrícola de riego, sobre todo de control y medición, con 40% de eficiencia; sobreexplotación equivalente a 601 millones de metros cúbicos anuales; pérdidas en riego de 60% y de 45% en sistemas de agua potable; problemas de hidroarsenicismo; sequías prolongadas y riesgo de daños por inundaciones.

Estos números y sus consecuencias no significan sin embargo lo mismo para todos -dice. "Sólo hay que ver la organización social de la producción que propicia la acumulación de la tierra, que necesita la contratación de jornaleros con sueldos bajos, y entenderemos por qué los beneficiarios hacen uso inadecuado del acuífero: la ganancia privada que se aumenta más y más."

Según el Resumen económico y de noticias de El Siglo de Torreón, 2018, la riqueza generada con la ganadería, en valor de la leche, fue de $ 16, 034' 669, 000, y en valor de la carne, de $ 4, 327' 906, 000, para un total de $ 20, 362' 575, 000.

Estos son datos que ponderan los que hablan de la pujanza económica de la región y de la imposibilidad de cambiar las cosas porque la economía regional se colapsaría; lo que es parcialmente cierto si se tratara de quitar las actividades agropecuarias subrepticiamente. Pero no sólo puede ser así; debería ser un cambio planificado. Pero antes que nada, se debe conocer el verdadero origen de los problemas, para a partir de allí buscar soluciones.

Tal es el neoliberalismo: mayor inversión en equipo y maquinaria moderna para emplear menos gente, aumentar el trabajo y pagarles menos. En términos técnicos se dice que es un cambio en la composición orgánica del capital (Cc + Cv). Se aumenta la inversión en capital constante y reduce la inversión en capital variable, lo que genera mayor ganancia privada.

En conclusión, "considero que es un modelo de desarrollo inmoral que se está acabando la región. Primero, porque ilegalmente se está acabando el agua. Segundo, porque produce mucha concentración de la riqueza en pocas manos. Y tercero, porque no genera los empleos que se necesitan."

¿Cuál es la lección que nos da la historia? "Que el problema es político y secundariamente técnico, porque el crecimiento económico debe ser con desarrollo social y que por el bienestar de toda la sociedad se deben respetar los límites que la propia naturaleza nos marca."

"La Conagua dejó a los usuarios autoregularse del aprovechamiento de aguas superficiales, cuando los grandes ganaderos fueron ocupando mayores espacios como usuarios, así que las decisiones estaban empañadas por los intereses de los mismos usuarios mayoritarios: los ganaderos y la corrupción como instrumento.

"Es que el aprovechamiento del agua debe regularlo el Estado, porque los usuarios no pueden realizarlo en igualdad cuando se está fomentando una sociedad tan desigual."

Así, en la parte final de su escrito, Ehrenzweig afirma: "Soluciones técnicas las hay, pero el verdadero problema es: ¿a quién se beneficia con las soluciones?".

@kardenche

Escrito en: Yo río libre debe, agua, usuarios, riego

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