La Cédula de Identidad; proyecto imposible
Desde 2008, el proyecto de la Cédula de Identidad para todos los mexicanos se ha heredado de Gobierno en Gobierno sin que se concrete.
La Ley General de Población, promulgada en 1974, estableció la creación de la Cédula de Identificación Personal como documento probatorio de la identidad de los mexicanos, pero la ley no se reglamentó.
ANTECEDENTES
En 1991 se creó el Registro Federal de Electores, y el 22 de julio de 1992 el Congreso aprobó la creación de la Clave Única de Registro de Población (CURP).
La CURP comenzó a operar hasta octubre de 1996, pero en 1998 el entonces Secretario de Gobernación, Francisco Labastida, anunció que no se podría implementar como identificación en la elección del 2000 por falta de presupuesto.
En 2004, el programa "Ejecución del Proyecto de Credencialización" fue creado y avanzó hasta licitar la creación de las identificaciones llamadas Formas Numeradas Multiaplicativas con la información biométrica de 26 millones de mexicanos.
Sin embargo, la Secretaría de la Función Pública suspendió la licitación por posibles irregularidades en la adjudicación del contrato.
RESURRECCIÓN
En 2008, durante la Administración de Felipe Calderón, se firmó un Acuerdo Nacional por la Seguridad, la Justicia y la Legalidad que entre otras cosas ordenaba la expedición de la Cédula de Identidad, documento contemplado en la Ley General de Población de 1974.
¿EL PLAZO DE EJECUCIÓN DE ESTE COMPROMISO? TRES AÑOS.
La Secretaría de Gobernación se compromete a integrar en un solo sistema el Servicio Nacional de Identificación Personal, que servirá de base para el propósito de identificación personal en los trámites más relevantes".
DOF, TEXTO DEL ACUERDO; LA MISIÓN
El documento pretendía incluir nombre, fotografía y datos biométricos de las personas, independientemente de su edad, con lo cual se buscaba abatir la falsificación de identificaciones y servir para trámites de carácter económico y financiero.
El Gobierno de Calderón contaba en 2009 con mil 136 millones de pesos aprobados por el Congreso para este proyecto, pero la cifra se redujo a 400 millones.
El proyecto completo, según las estimaciones de la Segob, requerirá 3 mil millones.
LAS RESERVAS
Mucho antes de nacer, las cédulas ya tienen detractores dentro de las autoridades administrativas.
En 2009, el entonces presidente del IFE, Leonardo Valdés, expuso a Gobernación que la naturaleza de la cédula podría desincentivar a los ciudadanos a tramitar y actualizar su credencial de elector, la identificación oficial más usada.
La Segob optó por usar actas de nacimiento y CURPs y definió que la cédula no contendría el domicilio del titular, para no afectar las funciones de la credencial para votar.
Otro de los peros al proyecto se fincó en el orden para recolectar datos biométricos de todos los mexicanos y garantizar que no estarían en riesgo de ser mal usados.
LOS INTENTOS
En 2009, Gobernación activó oficialmente el proyecto para elaborar la Cédula de Identidad Ciudadana al informar a la Secretaría de Hacienda que invertiría casi 500 millones de pesos para comprar 2 mil equipos de registro biométrico y otros tantos para encripción de datos.
La dependencia explicó que el proceso estaría a cargo del Registro Nacional de Población (Renapo) por medio de los mil 682 módulos para emisión de la CURP.
Los equipos costaban 492.4 millones de pesos y serían adquiridos en lo que restaba de 2009 y en 2010. Como costo total del proyecto para la cédula, la Segob calculó 2 mil 603 millones de pesos, incluidos mantenimiento y operación durante varios años.
Después de este anuncio, se mandó licitar el proyecto y el fallo fue pospuesto en tres ocasiones.
"GANADORES"
Smartmatic International Holding BV ganó un contrato para los equipos de información biométrica por 299 millones 476 mil pesos.
De inmediato las empresas perdedoras, Cosmocolor, Soltic, Mainbit e Image Technology México aseguraron que Smartmatic no cumplía con todos los estándares internacionales de calidad.
Axtel SAB de CV - Unisys de México SA de CV ganaron también en 2009 la licitación de la infraestructura informática que forma parte del Servicio Nacional de Identificación Personal, que serviría para expedir la Cédula.
La Secretaría reservó el contrato con Smartmatic International Holding, B.V. y las propuestas económicas presentadas por las empresas que participaron en la licitación pública.
NUEVOS FRENOS
Después de meses de cabildeo del Instituto Federal Electoral, a inicios de 2010 Gobernación se comprometió a no expedir la Cédula de Identidad y en cambio incrementar las medidas de seguridad en la credencial de elector.
Al año siguiente, después de diferirse la expedición para mayores de edad, el Ejecutivo federal emitió un decreto para que en un periodo de cinco años el Registro Nacional de Población iniciara la toma de imagen de iris a las personas mayores de edad, mientras que el registro de los menores y su respectiva Cédula de Identidad Personal sí se haría con esa captura biométrica.
A PASO LENTO
En la primera mitad del 2011, siete meses después de iniciado el registro de menores de 4 a 17 años, sólo se había registrado a 1.2 millones de menores de los 25.7 millones que el Renapo puso como muestra antes de que terminara el sexenio.
Al finalizar el sexenio, el total de registros terminó en 6 millones 877 mil 352 menores de edad, pero sólo se expidieron 3 millones 530 mil 260 cédulas.
RELANZAMIENTO Y FRACASO
Ya en la Administración priista, Miguel Ángel Osorio Chong, que a estas alturas era el quinto titular de Segob que tenía algo que ver con los intentos de expedir la cédula, impulsó una vez el proyecto.
Para 2015 ya habían llegado al Instituto Federal de Acceso a la Información y Protección de Datos peticiones para borrar los datos biométricos de menores a quienes no les fue expedida la identificación.
El IFAI ordenó a Gobernación eliminar de su base de datos las huellas dactilares, los registros de los iris y las fotografías de dos niños en la Ciudad de México, donde surgió la queja.
Aquel año, la Segob canceló el proyecto en definitiva.
LA DESTRUCCIÓN DE MILLONES
En 2018, con los antecedentes de datos impugnados y cientos de miles de cédulas creadas y no entregadas, Gobernación emitió un plazo fatal:
1.7 millones de cédulas de identidad de menores elaboradas en sexenio pasado serían destruidas si los interesados no las reclamaban.
Y REVIVE UNA VEZ MÁS
Ahora es la nueva titular de Segob, Olga Sánchez Cordero, quien planteó recuperar el fallido proyecto de la Cédula.
Renapo, el Registro Nacional de Población, va a tener recursos importantes porque es un hecho que el Gobierno de la República quiere ya tener una cédula de identidad única"
Olga Sánchez Cordero, Secretaria de Gobernación.
En que el proyecto de la Cédula de Identidad se ha heredado de
Gobierno a Gobierno.
El proyecto que retoma la Segob de la administración obradorista:
º Según las estimaciones de la Segob, requerirá 3 mil millones.
º El documento pretendía incluir nombre, fotografía y datos biométricos de las personas, independientemente de su edad.
º Se buscaba abatir la falsificación de identificaciones y servir para trámites de carácter económico y financiero.
º En 2008, durante la Administración de Felipe Calderón, se firmó un Acuerdo Nacional por la Seguridad, la Justicia y la Legalidad que entre otras cosas ordenaba la expedición de la Cédula de Identidad.