Tras el taponamiento de septiembre de 2016 en la Presa del Hielo, que derivó en las peores inundaciones en la capital en más de medio siglo, se consiguieron 40 millones para realizar un par de obras que reducen la posibilidad de que un incidente como aquel vuelva a ocurrir.
Sin embargo la Comisión Nacional del Agua enfrenta una lucha contrarreloj, pues si ese dinero no empieza a ejercerse en los próximos dos meses, regresaría a manos del Gobierno Federal; gastar dicho dinero no es tan sencillo, para hacerlo tienen que derribarse 12 viviendas ubicadas en la zona de dicho embalse de contención.
Yadira Narváez, directora de la Conagua en Durango, dijo que de estos 40 millones de pesos, 12 están destinados para la construcción de una represa aguas arriba de la presa del Hielo y los 28 restantes para rehabilitar y limpiar el vaso de esta presa.
Explicó que en estos momentos se tienen contabilizadas alrededor de 30 viviendas en riesgo en toda esa zona, pero de éstas un total de 12 están en situaciones críticas. Y son estas las que deben ser retiradas.
De esas 12, cuatro están asentadas o construidas afuera de la presa pero en la base de la cortina de la misma por lo que tienen que ser retiradas de forma urgente; las restantes viviendas están asentadas dentro del vaso de la presa.
En riesgo en toda esa zona