Estará 95 años preso por secuestro y homicidio

Saúl Favela Gallarzo, de 45 años, procedente del municipio de Tepehuanes, estará encerrado por 95 años en el Centro de Reinserción Social (Cereso) número 1 de Durango, ya que es el principal responsable del secuestro y asesinato de Desiderio Cano Gamboa, un hombre de 65 años que vivía en San José de la Boca, de la misma localidad que su victimario.

Este jueves la Fiscalía General del Estado informó que tras casi dos años de investigación se determinó el castigo del cabecilla del grupo de plagiarios que cometió este crimen el 12 de septiembre de 2017.

RECONSTRUCCIÓN DE HECHOS

El 21 de octubre de dicho año encontraron un cadáver en el kilómetro 14 de la supercarretera Durango-Mazatlán. Era un hombre mayor al que habían ahorcado, y al cual al poco tiempo identificaron como Desiderio Cano Gamboa.

Estudios forenses determinaron que el hombre llevaba muerto más de cinco días. Así comenzó la investigación. Desiderio había desaparecido desde el 12 de octubre, fecha en que lo secuestraron.

Saúl organizó el plagio porque el occiso le debía un millón de pesos. Él y sus cómplices Jesús, de 49 años de edad; Víctor, de 28; Jesús Raymundo, de 19 años; y Gerardo Isaí, de 35 años, acudieron al fraccionamiento Jardines de Durango, en la capital para levantar al hombre. Lo subieron a un vehículo Chevrolet, línea Malibu, tipo sedán, color blanco, en el que lo habían seguido sin que él se percatara.

Lo trasladaron a una casa de seguridad en el fraccionamiento Puertas del Sol, al suroeste de la ciudad.

Se comunicaron con un hermano de Desiderio, que vive en Estados Unidos, para pedir un rescate de un millón y medio de pesos, con lo cual se cobraría el adeudo que había, lo dejarían en libertad y se habrían ajustado las cuentas.

Sin embargo, el pago no se hizo por lo que decidieron matarlo tras nueve días de cautiverio.

Desde su ingreso al Cereso, en noviembre de 2017, Saúl Favela Gallarzo hizo todo lo posible por no quedar preso pero con las pruebas en su contra ese se convirtió en un sueño lejano.

El pasado 17 de septiembre en un juicio oral fue castigado con 95 años de prisión, así como una multa de un millón 290 mil pesos, y el pago de 405 mil pesos como reparación del daño.