Oxigenoterapia: alivio para la piel

No todos los tratamientos estéticos son para todo el mundo, pero hay uno que sí, y es el se centra en la oxigenoterapia, que lo pueden recibir desde embarazadas hasta pacientes con cáncer, no sólo por sus múltiples beneficios para hidratar la piel sino por el efecto de luminosidad y elevación.

Un tratamiento de oxigenoterapia consiste en la aplicación de oxígeno puro al 95% en conjunto con un suero especifico para cada tipo de piel, suelen ir con vitaminas, péptidos, aminoácidos y ácido hialurónico que trabajan para estimular la actividad celular favoreciendo la penetración y el consumo de oxígeno que aumenta el potencial energético de las células y estimula su renovación.

Es un tratamiento no invasivo y libre de parabenos y activos químicos agresivos, revitalizan y tensan la piel difuminando las arrugas y las líneas de expresión.

Lo importante es asegurarse de que el oxígeno penetre a presión en la piel y con él el serum aplicado en el primer paso del tratamiento, que contiene un alto contenido en nutrientes como vitaminas A, B, E, H y ácido hialurónico, componentes que contrarrestan los daños ocasionados por factores externos o bien por problemas específicos de cada tipo de piel, como las más sensibles de los pacientes con cáncer o las mujeres embarazadas.

Además, el tratamiento es ideal para todos los que quieren ver un resultado desde la primera sesión, porque incluso haciéndose sólo la mitad de la cara se nota la diferencia, pómulo más elevado y aunque ni siquiera tengas papada, sí se nota menos volumen global.