Ya es tiempo de ponerse a trabajar, ¿O hasta cuándo?

¿Quién está detrás del golpeteo a José Ramón Enríquez Herrera?, si no tiene posibilidad alguna de contender y llegar a gobernar Durango, ¿para qué tanto brinco?, ¿Qué intereses están detrás del golpeteo que está recibiendo?, después de que decidió en su legítimo derecho regresar al senado de la República.

Los tiempos de renovación de la gubernatura del estado se están adelantando y se perciben intereses de que así sea, pero ¿de quién?. ¿Qué intereses existen para querer descarrilar a los dos únicos políticos con posibilidades reales de ganar la elección en 2022?

¿Cuándo se verán las acciones emprendidas por el gobierno municipal capitalino?, lo anterior sí es que las hay. La falta de oficio político de algunos iluminados se está haciendo notorio cada vez más, y a los que sí lo tienen los relegan.

Las lunas de miel de los gobiernos actuales ya no son tan duraderas como antaño, o solucionan los problemas de inmediato o la ciudadanía exigirá resultados, la crisis en la que está envuelta la administración municipal es evidente y notoria, pero quien paga los platos rotos y la inexperiencia, es la comunidad.

La desesperación en la que están entrando tanto el gobierno estatal y algunos gobiernos municipales, no es más que la falta de planeación, falta de oficio político, de tener tanto personaje que se comporta como un "chivo en cristalería", y obvio la falta de resultados.

Los electores están claros de eso saben del poder que tienen al momento de sufragar nuevamente por las futuras autoridades, no es lo mismo criticar, hacer campaña que gobernar y sobretodo de cumplir compromisos que se hicieron de frente a los ciudadanos.

Si cada quien hiciera lo que le corresponde sería diferente, pero pensar en la próxima elección y dejar de lado lo que se gobierna actualmente no tiene perdón de nadie.

. . . puede ser que sí, puede ser que no, lo más seguro es que quien sabe, pero... Genaro García Luna a juicio por tráfico y por recibir soborno del narcotráfico sin duda es un golpe muy duro para el gobierno del expresidente Felipe Calderón Hinojosa y de Enrique Peña Nieto, que nunca hicieron nada en esta presunción de complicidad. Atentos todos porque vienen vacaciones navideñas, muy propicias para que se desaten más escándalos políticos, económicos, sociales y de combate a la corrupción.

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