Editoriales

NADIE QUIERE PAGAR IMPUESTOS

Manú Dornbierer

SATIRICOSAS

La reforma fiscal que no se acaba de concretar nunca se debe, según los enojadísimos economistas -panistas- neoliberales y sus precursores y amanuenses, a que los mexicanos no queremos pagar impuestos, porque... 1) "Somos unos transas". Puede ser, pero se da la casualidad de que los más transas, en el aspecto fiscal, son los que sostienen al gobierno y a los partidos con sus votos y obviamente con mordidas bajo el agua a funcionarios de todos niveles. Me refiero a los millones de comerciantes informales que en todas la ciudades de este país (algunos pobres, la mayoría cada vez más rica) hacen lo que quieren y son, me decía un notario, los que actualmente disponen de mayores capitales para la compra de propiedades. Esos comerciantes informales no pagan impuestos pero tampoco ningún servicio, luz, agua o la renta de la calle que nos pertenece a todos. Están además destruyendo los negocios legales, que sí pagan impuestos y demás gastos. La economía informal está ya absorbiendo a sus víctimas. Los comerciantes legales se están volviendo informales. ¿Para qué, se preguntan, pagar impuestos si a los millones de informales no les cobran? Ahí tendría el gobierno una inmensa base tributaria, pero no se atreve a hacer cumplir la ley. 2) "Somos unos ignorantes", dicen los economistas. Transas, quizás y no todos, pero ignorantes, no. Los mexicanos de hoy no quieren pagar impuestos por las mismas razones que los de ayer: Saben que su dinero, cada vez más duro de ganar legalmente, si aceptan más impuestos, servirá sobre todo para mantener a una burocracia cada vez mayor y más descarada. ¿O creen que no nos damos cuenta de lo que crecen y nos cuestan tantos miles de funcionarios inútiles? Tenemos uno de los más altos índices de burócratas per capita en el mundo. ¿ Qué creen que no vemos, como en tiempos priistas, los viajes suntuosos del Presidente y sus cortes por todo el planeta, cuyo único beneficio es el placer de los paseantes que se van a gastar nuestro dinero? ¿O que no sabemos lo que gastan Marta & Elba en sus vestuarios ? ¿Acaso ignoramos que los sueldos de los funcionarios panistas son mayores que los de sus equivalentes aún en países ricos? Fox, que gana el doble de AMLO por un desempeño menos exitoso, gana también más que Bush, Lagos, Lula, etc., aunque menos que algunos gobernadores panistas o que algunos de sus secretarios que se autorecetan sueldos de más de 250,000 pesos mensuales. Si el 11 por ciento de ciudadanos productivos y contribuyentes cautivos de México mantiene al resto del país, sería bueno que no mantuviera a tan onerosa burocracia que aumenta día tras día. LA DEFENSA DE LOS RICOS. Otra desaprovechada base gravable es la de los muy ricos. Pero Fox que pretende imponer el IVA en alimentos, algo canallesco en un país como éste ya que dañará la raquítica dieta de los más pobres, no osa tocar a ningún ricote. Al contrario, es su parapeto, su defensor. . . Por ejemplo, cuando su amigo Roberto Hernández vendió Banamex a Citibank, le permitió (¿o le sugirió?) NO pagar miles de millones de impuestos mediante una treta bursátil. Siempre protegen los gobiernos a los ricos, pero Fox no se mide. Impidió de acuerdo con la Suprema Corte, cada día más desacreditada, que se hicieran auditorías a los bancos ( hoy todos extranjeros) beneficiados por el Robaproa-IPAB. El rescate de esos bancos pagado aún ahora y durante muchos años más como deuda pública gracias al gringo Zedillo, que prefirió hacer pagar al pueblo que a los banqueros, seguirá pesándonos en lugar de que los canallas de cuello blanco sean investigados y paguen. Otra base gravable "olvidada" la constituyen la TV y la radio, que pagan el 25 por ciento de lo que deberían, por cortesía de Díaz Ordaz y sucesores, gracias al tiempo oficial que le dan a los gobernantes para que nos rellenen los oídos de mentirosa propaganda. UNA VERDADERA OPCIÓN Por todas estas razones y más hay gente inteligente y decente que no está en las cámaras, ni en el Ejecutivo, que se preocupa con conocimiento de causa e ideas justicieras por elaborar propuestas de Reforma Fiscal. El brillante analista de la UNAM Juan Ramón Jiménez propone la siguiente, que desde luego apoyo con entusiasmo: 1) Aplicar impuestos en cascada a las transacciones financieras ( al estilo Tobin Tax) ¿Por qué? Porque nuestro país tiene flujos de cerca de 60,000 millones de dólares invertidos a corto plazo en instrumentos de especulación, mientras la inversión directa, la que produce empleos, sólo llega a 10,000 millones de dolares; por lo tanto, hay que bajarle a la especulación de manera radical. 2) Gravar al latifundismo urbano. La Revolución de 1910 fue en contra del latifundismo rural, en los tiempos que corren hay que gravar al latifundismo urbano, en donde se lava dinero en grandes cantidades. 3) Impulsar un impuesto a la riqueza. Ya lo tiene Colombia y lo está aplicando el alcalde Bloomberg de Nueva York que es un súper rico y no un alcalde Rosado como AMLO. ¿Cómo hacerlo? Gravar con un 30 por ciento los activos de las clases más ricas, incluidas sus propiedades, sus tarjetas de crédito y de débito, sus viajes al exterior, sus animales de lujo (caballos, ganado, etc.), sus flujos de efectivo, etc. Hay que recordar que el más prestigiado presidente de los EU, Franklin D. Roosevelt, lo aplicó para salir de la Gran Depresión. Concluye Jiménez con el pensamiento que tenemos todos los mexicanos que queremos salvar a este país de la esclavitud económica que nos ha llevado, como a otros muchos países, a la miseria: "No nos hagamos tontos, debemos terminar radicalmente con el neoliberalismo". www.manu-dornbierer.com.mx

Escrito en: impuestos, millones, pagar, cada

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