Un artefacto explotó dentro de un autobús de servicio público en el municipio colombiano de Fómeque, unos 40 kilómetros al sureste de Bogotá, sin que se registraran víctimas.
El comandante de la Policía de Cundinamarca, coronel Fabio Castañeda, señaló que la explosión dentro del autobús podría tratarse de una extorsión contra la empresa de transporte municipal.
"Hasta ahora no hay ningún grupo que se haya atribuido este hecho, estamos investigando una posible extorsión contra los gerentes de esa empresa en Bogotá", dijo el oficial.
Castañeda indicó que unos ocho kilos de explosivos fueron activados en el autobús que partió en la mañana desde Bogotá y paró por unos momentos en la terminal de transportes en Fómeque, por lo que todos los ocupantes estaban fuera del vehículo en el momento de la explosión.
Asimismo, confirmó una recompensa por 40 millones de pesos (unos 19.000 dólares) por informes que conduzcan a los autores del atentado.
Las autoridades colombianas investigan a los responsables de dos atentados con explosivos perpetrados la noche del miércoles en una zona de ferreterías del centro de Bogotá, que causaron dos heridos y por los que fueron detenidas cinco personas sospechosas de apoyar a la guerrilla de las FARC.
El miércoles en la noche también estalló un explosivo en la ciudad de Ipiales (departamento de Nariño, frontera con Ecuador) frente a las oficinas de una empresa de seguros médicos que sufrió la rotura de sus cristales.