Ante la presencia de peces que no son propios de la región, tales como la tilapia, especies nativas de la cuenca del río San Pedro-Mezquital se encuentran en peligro de extinción, mismas que pueden ser únicas en el país y representativas de la riqueza biológica.
Especialistas de diversas instituciones estudiaron los ríos Tunal, La Sauceda, Santiago Bayacora, Poanas y Mezquital. Un hallazgo es que la situación de los peces nativos es alarmante, ante la presencia de especies exóticas o introducidas de gran resistencia, las cuales amenazan a las poblaciones locales poniéndolas en peligro de extinción.
La recomendación es evitar la introducción de especies y sustituir la tilapia por especies nativas, como el matalote chuime, al menos en los ríos que mantienen buenas condiciones.
Además, la vegetación de rivera, como el sauce, sabino, álamo y fresnos, representativos de Durango, tiene deterioro debido al sobrepastoreo no controlado y la falta de agua. La necesidad de regular el ganado en toda la cuenca es una de las recomendaciones.
Evento
La Alianza WWF-Fundación Gonzalo Río Arronte y la Dirección Local Durango de la Comisión Nacional del Agua (Conagua) realizaron un encuentro en días pasados, convocando a científicos y usuarios del agua de la cuenca del río San Pedro-Mezquital.
En la reunión participó una veintena de investigadores de la Universidad Nacional Autónoma de México, del Centro Interdisciplinario de Investigación para el Desarrollo Integral Regional (CIIDIR-IPN) y del Instituto de Ecología.
Evaluación
Los investigadores estudiaron el estado ecológico de los ríos en cuanto a cantidad, calidad de agua, vegetación de rivera, insectos acuáticos, peces y geomorfología, así como los usos sociales y tradicionales de los duranguenses.
Los ríos se estudiaron por tramos, considerando especialmente las infraestructuras como presas o derivadoras que regulan el agua para la agricultura, así corroboraron que en algunas zonas la modificación y disminución del caudal respecto al que llevaba de forma natural ha contribuido mucho a su deterioro, así como de todos sus valores y beneficios para la sociedad.
En los casos más extremos como aguas abajo de La Ferrería, el río no lleva agua durante muchos meses. Aquí, al igual que en el entorno de Santiago Bayacora, los daños a los ríos son evidentes, debido a otros factores, como la extracción masiva de materiales pétreos.