El Ayuntamiento ya busca los apoyos financieros estatales y federales por más de dos millones de pesos para la construcción del relleno sanitario, obra que desde hace tres trienios quedó en propuesta.
La ampliación de la carretera Durango-Zacatecas permitió al Ayuntamiento detectar el terreno donde se construirá el nuevo relleno sanitario, lo que vendrá a ser el final del basurero.
Ofrecimiento
La maquinaria que trabaja en la construcción de la carretera dejó grandes hoyos de donde sacaron los bancos de materiales y le fueron ofrecidos al Municipio por la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat).
De esta forma, el terreno se abarata y el Ayuntamiento está en posibilidades de conseguir hasta el 90 por ciento del financiamiento para la compra de la superficie y hacer la obra, lo cual esta vez se avizora como un hecho, después de muchas promesas e intentos.
Ubicación
Según fuentes del Ayuntamiento, el terreno mencionado en estas condiciones se ubicaría a escasos 300 metros de donde se localiza el actual basurero municipal, mismo que representa un foco de infección y un serio peligro para los usuarios de la carretera Durango-Zacatecas, debido a las dendas humaredas cuando queman los desechos sólidos.
El costo del terreno no rebasaría los 100 mil pesos, debido a las condiciones en que está y lo más caro, de acuerdo con Obras Públicas Municipales, sería extraerle el material para dejarlo en óptimas condiciones.
El Ayuntamiento buscaría completar la inversión, donde aportaría sólo un 10 por ciento de los dos millones de pesos, que sería el costo total, que correría a cargo de las autoridades federales y estatales.
Obligación de todos
La Norma Oficial 083 de la Semarnat exige a todos los municipios la construcción de rellenos sanitarios, pero los resultados son nulos; los 39 ayuntamientos del estado carecen de esta infraestructura. A orillas de las carreteras y caminos vecinales se observan tiraderos de basura y animales muertos.
Algunos argumentan falta de presupuesto, pero en sus proyectos omiten la obra. En la zona sureste, el Ayuntamiento emanado del Partido del Trabajo (PT) en Poanas propuso hace más de diez años la construcción de un relleno sanitarios regional, pero dadas las diferencias políticas no se logró. En Súchil gobernaba el PRD, en Guerrero el PAN y en Nombre de Dios el PRI.