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La apuesta de comprar casa en pareja

La apuesta de comprar casa en pareja

La apuesta de comprar casa en pareja

AGENCIAS

Adquirir una casa o departamento de manera individual cada vez es más complicado, ya que los precios en el mercado inmobiliario crecen año con año.

"El costo de los materiales de construcción ha aumentado cerca de un 30% del año pasado a éste, por lo que el valor de las propiedades se ha incrementado en un 18% aproximadamente", señala Christian Stangl Correa, country manager de la proptech La Haus en México.

Es por ello que hacerse de una propiedad con ayuda de un cónyuge, pareja (incluidas aquellas del mismo sexo o en unión libre), familiar o amigo se ha convertido en una opción para quienes buscan construir un patrimonio, pero no cuentan con la solvencia económica para alcanzar este propósito.

UNAMOS CRÉDITOS

"La principal ventaja consiste en que, al sumar dos ingresos, los participantes pueden calificar a un monto superior de crédito, lo cual les permitirá acceder a viviendas que, de forma individual, no podrían comprar", indica el especialista en temas inmobiliarios. Esto se traduce en propiedades con mejor ubicación, mayores dimensiones o amenidades exclusivas.

Al asumir este compromiso de manera compartida también se logra una mayor capacidad de ahorro, lo que da la posibilidad de pagar un enganche más alto, aportar una mayor cantidad de dinero cada mes o, simplemente, poder cubrir el pago mensual sin tener que sacrificar otros gastos. Y es que no hay que olvidar que este acuerdo se extiende a varios años.

En febrero de 2020, el Instituto del Fondo Nacional de la Vivienda para los Trabajadores (Infonavit) puso en marcha un esquema que permite juntar un crédito con el de otra persona, ya sea pareja (estén casados o no, así como del mismo sexo), amigos o familiares, es decir, padres, hijos o hermanos.

"Se trata de un contrato de copropiedad en el que las personas pueden aumentar su capacidad de crédito para adquirir una mejor vivienda, por ejemplo, en áreas más céntricas de la Ciudad de México o de otras entidades del país. Al quedar establecido este tipo de esquema en la escritura, es más fácil disolverlo en caso de separación".

"Al ser copropiedad, el financiamiento se da en proporción a lo que cada uno aporte al monto total del mismo. Es decir, si una casa o departamento cuesta dos millones de pesos, y uno de los derechohabientes tiene un mayor salario de cotización y una mayor cuenta de vivienda, obtendrá un porcentaje más alto de la propiedad. Por ello, un usuario puede ser dueño del 60% y el otro, del 40% restante", explica el director general del Infonavit.

OPCIONES DE SALIDA

Dado que la compra de una vivienda es un compromiso a largo plazo, en el camino pueden suscitarse conflictos que provoquen la ruptura del vínculo amoroso o amistoso, por lo que resulta importante conocer las opciones disponibles para llevar a cabo la disolución del contrato. Por lo general, y de acuerdo con los especialistas, éstas quedan establecidas en el acuerdo, así que no hay necesidad de realizar un documento privado.

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