Lo que viene para el 2023
Si bien es cierto, los procesos electorales del 2022 no han terminado, ya que está pendiente la etapa impugnativa, hoy la agenda electoral ha pasado de hoja, posicionándose 3 temas: la reforma electoral, las elecciones de 2023 y la sucesión rumbo al 2024.
En lo inmediato, están las discusiones para conformar una nueva reforma electoral. De entrada se antoja difícil que pueda concretarse por el contexto político; sin embargo, siempre es posible, sobre todo si se parte de un diagnóstico claro y existe el ánimo entre las fuerzas políticas de consensuar sus propuestas. Es claro que ninguna fuerza política tiene los votos necesarios para imponer su visión, además que los actuales ejercicios de parlamento abierto, aunque valiosos, no han tenido el impacto deseado.
Nuestro sistema electoral es perfectible; sin embargo, el modelo actual ha demostrado que funciona, por lo que una reforma, más que ser refundacional, debería de considerar las áreas de oportunidad que existen, por ejemplo, dar un salto decidido al voto electrónico.
El segundo tema en la agenda son las elecciones en Coahuila (renovará su gubernatura y su Congreso Local), y en el Estado de México, que renovará únicamente su Poder Ejecutivo. Ambos casos llaman la atención, no tan solo por ser las únicas 2 elecciones, sino por la posibilidad de una transición en el partido en el poder, el peso poblacional del Estado de México y en el ámbito partidista, que tan competitivo podría ser una coalición (siguiendo el modelo de Durango).
Por cierto, es muy interesante el acuerdo que tomó el Instituto Nacional Electoral (INE) sobre el sexo que deberían de tener las personas que postularían los partidos o coaliciones. Esta es la tercera ocasión que la autoridad nacional electoral, siguiendo el principio de paridad en todo, obliga a los partidos políticos a postular cierto número de mujeres para el cargo de la gubernatura. En 2021, de las 15 elecciones, los partidos tenían que postular candidatas a la gubernatura en por lo menos 7 entidades; en 2022 que tuvimos elecciones 6 estados, fueron por lo menos 3 mujeres; en 2023, será una candidatura para cada sexo.
Las más recientes resoluciones jurisdiccionales no solo obligan a postular a un determinado número de mujeres, sino que además compitan en las entidades federativas con mayor posibilidad de triunfo; y por supuesto, que previo a la emisión de las convocatorias para los
Procesos internos definan en qué entidades habrán de postular candidaturas de mujeres y hombres, por lo que los partidos están obligados a modificar sus documentos básicos.
Por último, está ya muy presente la sucesión del Ejecutivo federal, contaminando los procesos electorales 2023, aumentando la posibilidad de cometer actos anticipados de campaña o precampaña o incluso de provocar la promoción personalizada de servidores públicos o de uso de recursos públicos.
* El autor de esta colaboración es consejero del Instituto Electoral y de Participación Ciudadana del Estado de Durango (IEPC).
Twitter: @omarortegasoria