Una pésima semana para México

Una semana muy complicada vivió esta semana nuestro país y particularmente el presidente Andrés Manuel López Obrador quien insiste en radicalizar las acciones de su gobierno que no le han funcionado y que además han sido altamente criticadas.

La discusión arrancó este lunes cuando López Obrador anunció que emitirá un decreto para que la Guardia Nacional -su cuerpo de seguridad favorito-se ponga por completo al mando de la Secretaría de la Defensa Nacional.

En otras palabras se confirma el deseo presidencial de militarizar al cuerpo de seguridad creado por su régimen en el 2019 para combatir al crimen organizado y que en un principio se acordó contar con un mando civil.

Con esta decisión -que todavía está por verse si se cumple a cabalidad-el régimen morenista dobla las manos en cuanto a instalar en el país un cuerpo policiaco profesional y alejado de las esferas militares que en el pasado demostraron eficiencia pero también excesos en corrupción y en la violación de los derechos humanos

La Guardia Nacional es la mayor corporación policiaca del país con 114 mil elementos, sustituyó a la Policía Federal y en sus inicios fue integrada por elementos de Marina y de la Defensa Nacional. Miles de sus agentes han sido también adiestrados de manera profesional.

Sin embargo, este cuerpo de seguridad no ha respondido a las exigencias, se esperaba que con tantos miembros y a tres años de su nacimiento, el país estaría en calma y con una caída abrupta en homicidios dolosos. No ha sucedido así, lamentablemente.

En tres años y medio de este gobierno van más de 120 mil homicidios contra los 156 mil del sexenio de Enrique Peña Nieto y los 121 mil durante la presidencia de Felipe Calderón.

Nada asegura, pues, que con solo pasar el mando de la Guardia Nacional a los militares se resolverá el problema de la violencia en México, cuyas raíces se fincan en la impunidad, la corrupción y la falta de valores.

España cuenta con una guardia civil de 85 mil elementos que está al mando de las fuerzas armadas, sin embargo comparte su labor con el Cuerpo Nacional de Policía de mando civil.

Algo similar sucede en Francia con la Gendarmería Nacional que opera con 150 mil policías, pero se enfoca más a las zonas rurales y suburbanas mientras que la Policía Nacional se encarga de la seguridad urbana.

Lo ocurrido el martes por la noche en Jalisco y en varios estados del Bajío demostró una vez más el enorme poder de respuesta del crimen organizado, por suerte en esta ocasión no hubo masacres y varios capos de peligro fueron puesto a buen recaudo.

El terrible accidente minero en una mina de la comunidad de "Las Conchas", cerca de Sabinas, Coahuila, mantiene en tensión a los mexicanos ante la posibilidad de que diez mineros que permanecen atrapados sean encontrados sin vida.

Una vez más se evidenció la falta de seguridad en la industria minera, no se olvida la tragedia de la mina Pasta de Conchos, también en Coahuila, donde 65 trabajadores perecieron en el 2006 luego de un gigantesca explosión.

López Obrador visitó "Las Conchas" sin pena ni gloria, su estancia en la mina fue infructuosa porque no logró ningún avance en cuanto al rescate de los mineros desaparecidos.

La ineficiencia y falta de tecnología para hacer frente a estos accidentes es por demás notoria al tiempo que saltan a la vista las ilegalidades en el manejo y operación de las minas mexicanas. Vaya ni siquiera se sabe a quién pertenece la concesión de esta mina de carbón.

Vamos ya rumbo al final de cuarto de año de gobierno de López Obrador y los resultados están a la vista, mejor dicho, la escasez de los mismos.

Noticia final...

Allende del Bravo las aguas rumbo a las elecciones presidenciales de noviembre del 2024 han empezado a calentarse, la maquinaria demócrata está trabajando duro para enjuiciar de nuevo a Donald Trump y sacarlo de la jugada, pero no se observan figuras del partido azul para ganar la Casa Blanca. Los republicanos por su parte tienen a varios posibles candidatos calentando el brazo, entre ellos el gobernador de Florida, Ron DeSantis; el gobernador de Texas, Greg Abbott; y el ex vicepresidente Mike Pence. ¡Hagan sus apuestas!

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