Detalles. El informe del Coneval establece que hay desigualdades en el financiamiento de los sistemas de salud.
El gasto de bolsillo en México es de 42.1 por ciento, que equivale al doble del 20 por ciento del gasto corriente total en salud recomendado por la Organización Panamericana de la Salud (OPS). Adicionalmente, el porcentaje de la población que incurrió en gastos catastróficos en México se duplicó entre 2018 y 2020 al pasar de 2.4 a 4.4 por ciento.
Así lo reveló la Evaluación integral de la política social vinculada al derecho a la salud 2024-2024 que elaboró el Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval), la cual realiza la vinculación y valoración de los programas, acciones y fondos de desarrollo social con la atención de los retos para la garantía del derecho.
A partir de este análisis, se pusieron a consideración del Gobierno Federal recomendaciones y rutas de acción para la planeación nacional.
En tal sentido, se estableció que es positivo que desde el inicio de la administración se plantee la reducción de la incidencia del gasto de bolsillo mediante el fortalecimiento de la atención primaria, además de las acciones que se implementarán para expandir la infraestructura y disponibilidad de servicios en regiones con población en situación de vulnerabilidad, así como el incremento de los salarios del personal de salud. (De acuerdo con el IMCO, el gasto de bolsillo es el gasto directo de las familias para solventar requerimientos de la atención de la salud).
Se hizo referencia a que existen retos estructurales que impiden garantizar el derecho a la salud como son: la fragmentación y segmentación del sistema público de salud, la falta de directrices integrales acerca de su funcionamiento y coordinación en el marco de su reconfiguración, la baja inversión y la asignación desigual de los recursos entre subsistemas, así como la calidad diferenciada de la atención y los servicios.
Como consecuencia de la baja inversión, la fragmentación de los sistemas y las desigualdades en el financiamiento, el gasto per cápita en salud para la población sin seguridad social fue de $3,979.7, en comparación con los $5,446.0 asignados a la población con seguridad social.
Por lo que el informe del Coneval concluye que resolver los retos estructurales permitirá avanzar en temas más específicos como el gasto de bolsillo en México, las atenciones médicas preventivas y en áreas con padecimientos de atención prioritaria, así como el déficit en recursos humanos y la necesaria completitud, integralidad y consolidación del sistema de información.
Además, se planteó la necesidad de regular la generación y calidad de bienes y servicios de salud, incluyendo los ofrecidos en los Consultorios Adyacentes a Farmacias (CAF), y crear un Sistema Nacional de Inteligencia en Salud para contar con información para la planeación, implementación y seguimiento de la política de salud, así como para reaccionar de manera oportuna ante emergencias sanitarias.