
La más poderosa
Para Rabindranath Tagore la historia es -en esencia- la evolución del ser humano. El cimiento es un marco ético que defina los rumbos, una creación humana. Las historias nacionales son piezas del mapa general. Dicen mucho. Una gran diversidad caracteriza el mundo, pero, por eso nos obliga a ciertos asideros conceptuales intocables. Francisco, llevó su fe a Jordania, Palestina, Israel, Timor Oriental, Indonesia. Buscó tolerancia. León XIV, lanza las primeras señales: migraciones, convivencia pacífica, defensa de la medicina. Sin decirlo, mira a Trump. Más allá de la fe religiosa, las iglesias pueden ser fuentes de civilización, también de guerra. En tiempos convulsos y de confusión, la ética, es un arma muy poderosa, quizá la más. ¿Hitler o Stalin?
Aparece ante el mundo Sanae Takaichi, la primera mujer en ser la líder de un país con muchas costumbres contrarias a la igualdad de género. Su simple designación sacude costumbres milenarias. Alentador. Machado es Nobel. Pero en paralelo se multiplican las confrontaciones con el ICE, igual en Chicago, en la famosa "Villita", que en Nueva York o en Carolina del Norte. Madres, jóvenes, sometidos por la política de un demagogo que gobierna de nuevo a la primera potencia. Engaña negando la enorme dependencia de EEUU de los flujos migratorios: agricultura, construcción y servicios, entre el 40 al 50%. Las pulsiones raciales se apoderan de la mente de millones. Los avances educativos de Estados Unidos, van en picada. Cero apoyo a la investigación. "América para los americanos", pero no para todos.
Mientras en China construyen el desplazamiento imperial de EEUU con educación y tecnología, nuestro vecino festeja la ignorancia y nombra en salud a un individuo que no cree en las vacunas. Suicida. Es el mismo sujeto que manda destruir lanchas que -seguramente- llevaban droga a su país, pero los hechos se mofan de todas las convenciones que el ser humano ha logrado para, incluso, paradoja, reglamentar las guerras. Trump, que odia todo lo multilateral: retira fondos para tratamiento de niños con exposición al VIH. Dice Tagore, la historia leída por naciones da señales, pero ver el todo. Las tensiones nucleares entre India y Pakistán, los amagos del locuaz líder de Corea del Norte, normal. Es el regreso a la barbarie. La Unión Europea sigue siendo un venero de pensamiento civilizatorio. Le falta fuerza conceptual.
¿Y México, qué papel debe jugar? El régimen se ahoga en la incongruencia, su gran debilidad. Hay excepciones. La estigmatización de México por la crisis de droga -fentanilo en particular- se está logrando la corresponsabilidad. Si hay demanda, habrá producción y tráfico. Cifras: en el 2021 más de 500 000 personas hicieron un mal uso del químico. El fentanilo fabricado ilegalmente es 50 veces más potente que la heroína. Se calculan alrededor de 200 muertes por día, más de 70 000 al año. ¿Evolución humana? Asoman luces. La honestidad, un valor ético venido a menos, mostró su calibre. AMLO negaba la existencia de laboratorios, pero las Fuerzas Armadas mostraban la destrucción de los sitios. Fuera máscaras. Al igual que en México, en Estados Unidos hay cientos de miles de personas involucradas. Que admitan la corresponsabilidad, es una gran batalla. De ahí la relevancia de la propuesta impulsada en México por Eduardo Guerrero: un tratado de seguridad para América del Norte. El trasnochado concepto de soberanía, tiene seguidores, en el mismo gobierno, es herejía. Pero el rumbo es el correcto: primero salvar vidas. ¿Pérdida real de soberanía? Miremos a Michoacán. La cooperación es civilizatoria.
Churchill no organizó una sola marcha pública. Pero sus palabras y actos marcaron la historia. Fin al desfile salpicado de corruptos, fin a la mentira oficializada, fin a la sumisión al caudillo, al cinismo de rodearse de cómplices. Los conceptos no llenarán el Zócalo, pero mostrarían un gobierno con la brújula. Festejo en el Zócalo y carro bomba.
Ética como poder.