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Con estos ex presidentes pa' qué queremos enemigos

LUIS ÁNGEL TEJADA

La verdad que los electores nos hemos preguntado cómo es que llegamos a elegir presidentes de nuestro país, a personas tan patéticas, como cínicas, que dejan el poder y los vemos al desnudo, tal cuales, bajados de la deidad de su reinado sexenal, se exhiben como lo que son: impúdicos, inmorales, deshonestos, mentirosos y ahora "escupiendo para arriba" algunos, otros aconsejando medidas que ellos no tomaron en su tiempo y otros más con jugadas burdas para lavar sus manchas y neutralizar condenas públicas que se multiplican y querer seguir siendo factores de decisión.

Miguel de la Madrid rompió el silencio de su gris carácter y se dice arrepentido de haberle entregado la Presidencia de México a Carlos Salinas de Gortari, porque desconocía la moral de los Salinas. Insultó a los mexicanos decir que no conocía a un colaborador tan cercano de tantos años. Lo que, suponiendo sin conceder, qué irresponsable entregar el poder a quien no conoce. ¡Qué bárbaro! Qué manera tan infantil de deslindarse del creciente desprestigio de su pupilo y cascada de escandalosos testimonios de su corrupción.

Carlos Salinas de Gortari, fiel a su estilo personal de emular éste sí a Maquiavelo, manipula y opera bajo las sombras, para descalificar a su tutor político MMH de demente y senil. "Que su cerebro ya no funciona", qué cruel, qué escarnio.

Ernesto Zedillo Ponce de León, súbdito del nuevo capitalismo rapaz, imitando a Moisés, lee los diez mandamientos, a manera de recomendaciones para salvar a México: imponer nuevos impuestos a los mexicanos, como gravar los alimentos, las medicinas y cobrar la educación, subir el IVA y los insumos, subir las gasolinas y el gas, así como desaparecer los subsidios y los apoyos paternalistas.

De plano quiere que se encienda el país, por lo que los mexicanos al unísono nos preguntamos, si tan seguro está de que esa es la salvación, ¿por qué no se atrevió él a hacerlo? Lacayo de los consorcios más ricos del mundo. ¿Por qué no dice que paguen más impuestos los que tienen más, no el pueblo? Estos economistas elitistas, no tocan a los ricos, sólo al pueblo, ¡como él gana en dólares por ser el escudero de esas poderosas corporaciones! Que se amuelen los mexicanos, a los que un día por desgracia representó. Pido una disculpa por no poder expresar de otra manera mi indignación de mexicano ante este señoritingo de la política, que ni siquiera era priista cuando se le hizo candidato a Presidente de la República, por eso no hizo nada por no perder el poder.

La llegada de los siniestros tecnócratas al poder fue el gran drama de una generación perdida, los neoliberales desplazaron y despreciaron a los políticos, a algunos nos confinaron a la muerte civil, y a otros sólo los usaron como peones, pues les sacaron las manos de las decisiones fundamentales de este país y de las posiciones estratégicas, vendieron favores a los poderosos y entregaron Las Plazas en "charola de plata" al PAN. Se apoderaron del PRI y alguno de ellos sigue moviendo los hilos.

Con estos ex presidentes ya para qué queremos enemigos, los ex presidentes de ahora hacen empequeñecer a los ex presidentes de los 60 y 70, Gustavo Díaz Ordaz cuando decía que se arrepentía de haber dejado a Luis Echeverría y Echeverría acusar a Díaz Ordaz de "los emisarios del pasado".

Pero no es un mal de los ex presidentes del PRI, en todos lados se cuecen habas, del PAN se dicen calamidades por lo pronto de uno nada más, porque sólo un ex presidente hay del PAN, pero qué podemos decir de Vicente Fox, cuando declaró el desvergonzado que él no había gobernado el país, que encargó el "Changarro" de Los Pinos a otras personas, para poderse dedicar a hacer campaña. De que los hay los hay... Qué estulticia, qué irresponsable. Qué tristeza me da, y son los estadistas que tuvieron en sus manos al país, con razón se lo han acabado.

Séase escrito con el perdón de nuestros lectores, pero qué merece decirle a un hombre tan frívolo, a un analfabeta de la historia y de la política que ha ofendido a los mexicanos con sus ocurrencias rancheras, llamándoles locos a los actuales legisladores y sus limitaciones mentales reconocidas hasta por el Vaticano, el mismo que saludó en su toma de posesión como presidente, primero a sus hijos que al Pueblo de México, el que les dijo a nuestras mujeres "lavadoras de dos patas", el que les dijo a los indígenas y niños que era mejor no saber leer, para ser más felices y tantas y tantas sartas de p... Hoy en día, el escándalo está ocupando el espacio de la política. Qué pena. Mientras los políticos se pelean, los mexicanos pagando los platos rotos, que nos dejaron los ex presidentes. Aunque los tortuosos se alían aunque sean de distintos partidos, ¿verdad Fox y Salinas? ¡No hay política ni principios, hay intereses, hay complicidades! Otra vez, ¡qué triste!

Escrito en: presidentes, poder, país,, mexicanos

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