El trabajo conjunto entre organismos académicos, organizaciones civiles y autoridades estatales permitiría en el mediado plazo obtener una radiografía digital de la geografía y principales ecosistemas de Yucatán.
La finalidad de esta labor es ordenar mejor las actividades productivas y evitar mayores daños ecológicos.
Tras la consolidación del Programa de Ordenamiento Ecológico Territorial de Yucatán, se busca iniciar un programa más ambicioso para obtener datos más amplios de los ecosistemas locales.
De ahí se emprendió lo que fue denominado Sistema de Información Geográfica (SIG), con el cual las autoridades estatales buscan transformar datos geográficos en información confiable para la toma de decisiones.
El SIG es una estructura organizada de hardware (equipo), software (programas) y procedimientos sistemáticos manejados por especialistas para obtener, procesar, analizar y modelar información referenciada con el objeto de resolver problemas de planificación y gestión.
El propósito es incrementar el conocimiento a partir de la relación datos información, manejar bases de datos geo-referenciadas, una dimensión temporal y crear nuevos modelos de desarrollo en las zonas de conflicto.
La idea es tener información que refuerce el ordenamiento ecológico y generar un gran banco de datos de la geográfica de Yucatán, sus ecosistemas, actividades, características, entre otros, explicó el especialista de Pronatura, Gerardo García Contreras.
"Por medio de las alianzas con la Universidad Autónoma de Yucatán (UADY) y el Centro de Investigaciones Científicas de Yucatán (CICY) se cuenta con mecanismos para obtener y revisar información", declaró Gerardo García.
"Así como integrar y homologar diversos insumos científicos como por ejemplo para analizar el posible cambio de uso de suelo en determinada zona", agregó.
Comentó que los primeros datos son simples y señalan por ejemplo que Yucatán representa el dos por ciento de la extensión del país, se caracteriza por no tener ríos superficiales pero tiene un gran sistema de cuevas y cavernas subterráneas, y cenotes y aguadas.
Debido a su ubicación geográfica en los últimos años se ha promovido el desarrollo agropecuario, por lo que ahora es el estado más deforestado de la Península de Yucatán, apuntó el especialista.
"El desarrollo de las actividades humanas fue por muchos años sin marco de ordenamiento y planeación a corto plazo, por lo que es indispensable contar con un ordenamiento territorial a nivel estatal y eso es lo que hemos estado desarrollando desde 2006", precisó.
Expuso que el modelo de ordenamiento ofrecerá una serie de lineamientos para que las actividades económicas sean reguladas y contribuyan a la conservación del medio ambiente en el territorio estatal.
"Entre de los retos más importantes es el ordenamiento de las actividades agropecuarias, y en las zonas urbanas, el desarrollo industrial, el cual ha sido promovido en ciudades medianas desde 2000", comentó Gerardo García.
El académico advirtió que de no lograrse un ordenamiento adecuado, los recursos naturales se verían seriamente degradados a causa del desarrollo desordenado de las actividades humanas y habría una mayor migración de las zonas rurales a las urbanas.
Por otro lado, las acciones buscan identificar los usos potenciales del territorio con el fin de lograr la armonía entre la naturaleza y el desarrollo de las actividades económicas del estado.