Miles de estudiantes y representantes de organizaciones públicas y privadas de Honduras participaron hoy en la conmemoración del Día de la Tierra con mensajes de concienciación en defensa del planeta.
En Tegucigalpa, estudiantes de escuelas y colegios desfilaron con mensajes alusivos al tema, mientras una empresa comercial convocó a varios sectores para la limpieza de una cuenca de la represa Los Laureles, una de las dos fuentes de abastecimiento de agua más importantes que tiene la capital hondureña.
La jornada, desarrollada en varias ciudades del país, incluyó la limpieza de otras cuencas hidrográficas, de represas de agua potable y la reforestación de áreas que han sido destruidas por incendios forestales y tala de bosques.
El titular del Instituto de Conservación Forestal, José Trinidad Suazo, resaltó la importancia que tiene la defensa de los recursos naturales e indicó que en lo que va del año se han registrado cerca de 500 incendios forestales en la nación.
En la cruzada de hoy en Tegucigalpa también se celebró un foro en la planta baja del Parlamento hondureño, mientras el presidente de ese organismo, Juan Orlando Hernández, participó con estudiantes de colegios en la distribución de mensajes relacionados con la defensa y protección del medio ambiente.
El presidente de la Comisión del Medio Ambiente del Parlamento, Augusto Cruz, dijo que el país atraviesa una situación muy grave y que se debe "trabajar seriamente" para ver "cómo se reconstruye el planeta" y "no permitir" que los recursos naturales se agoten, porque con eso "también se agotaría la vida".
Honduras, un país de vocación forestal, pierde anualmente entre 80.000 y 120.000 hectáreas de bosques por incendios, muchos de ellos provocados por el hombre, el consumo de leña como combustible y la agricultura migratoria hacia las montañas, entre otras causas, según fuentes oficiales y organizaciones ambientalistas.
El país, con una extensión de 112.492 kilómetros cuadrados, es uno de los más vulnerables de Centroamérica, acotó Cruz.
Producto de la sequía que ha vivido la nación, su capital sufre actualmente un drástico racionamiento de agua que se podría prolongar hasta junio próximo, cuando se espera la llegada plena del invierno.