El machismo y la idiosincrasia de cientos de indígenas de la sierra de Mezquital impiden a las mujeres crecer en el ámbito laboral, pues existen diversos programas como el (POPMI) Proyectos Productivos para Mujeres Indígenas, en las que son apoyadas; sin embargo, en muchas ocasiones sus cónyuges no les permiten trabajar, señaló Óscar Ramón Ortiz Gutiérrez, delegado estatal de la Comisión Nacional para el Desarrollo de Pueblos Indígenas (CDI).
PARTICIPACIÓN
La respuesta de la mujeres duranguenses es muy positiva, son de las que deciden emprender sus propios negocios; una mínima parte ha desistido por las mencionadas causas, pues se trata de proyectos colectivos de entre 10 y 12 mujeres en las que ellas sólo ponen una pequeña parte; la CDI les ayuda con un promedio de 100 mil pesos.
En los primeros ocho meses de 2010 se ha logrado beneficiar a poco más de 280 féminas con dos millones y medio de pesos.
JÓVENES
Muchas de las beneficiadas son mujeres de escasa edad, de entre 15 y 22 años, pues a temprana edad son madres de familia y buscan superación personal y económica para elevar su nivel de vida y el de sus hijos, "desafortunadamente hay proyectos que sólo se quedan en papel, pues sus parejas no les dan la oportunidad de lograr un mejor desarrollo", acentuó el Delegado.
MADUREZ
Las mujeres han demostrado ser más eficientes, responsables y distribuyen mejor el recurso económico con el que se cuenta, son más conscientes de la situación por lo que actúan con mayor cautela ante las necesidades y emergencias que pudieran presentarse, están adoptando una cultura de ahorro que las beneficia en gran medida.